Este artículo se publicó hace 17 años.
La argentina Ponce y el italiano Giò Di Tonno vencen en un Festival a la baja
La cantante y actriz argentina Lola Ponce ha ganado junto al italiano Giò Di Tonno el Festival de la canción de Sanremo con el tema "Colpo di fulmine" ("Flechazo") en un certamen que ha tenido las audiencias más bajas de su historia.
En segundo lugar de esta 58 edición quedó la cantante Anna Tantagelo con la canción "Il mio Amico" (Mi amigo) y en tercera su colega Moro con el tema "Eppure mi hai cambiato la vita" ("Y sin embargo, me has cambiado la vida").
Según los críticos, la canción de Ponce y Tonno, escrita por la cantante y compositora italiana Gianna Nannini, "no aporta nada nuevo", pero con su "retórica tempestuosa" y una interpretación "que desencadenó escalofríos de pasión", logró imponerse a la favorita, "Il mio Amico".
Lo más llamativo de este año, sin embargo, no ha sido el aspecto musical, sino que Sanremo ha caído en espectadores hasta registrar las cuotas más bajas de su historia, al menos desde que existen los medidores de audiencia.
La final de anoche la vieron menos de diez millones de personas, 9,6 millones, con una cuota de pantalla del 39,47%, frente a los 12,4 millones, el 48,78% de cuota, que registró el año pasado.
La segunda parte del festival descendió a los 6,9 millones de espectadores, mientras que la media de las cinco noches fue de 6,6 millones con una cuota de pantalla del 35,44%.
Aunque para los niveles de televisión en otros países son cifras altas, para Sanremo son muy bajas, hasta el punto que durante la semana se vio superado en ocasiones por otras cadenas, un acontecimiento que nunca había ocurrido.
Los periódicos italianos destacan la caída de Sanremo y descartan que sea un tropiezo, sino más bien "el final del viaje" de un tipo de festival que tuvo en Europa su mejor momento en los años 1960 y 1970, pero que poco a poco fue declinando en todos los países, excepto Italia.
"Último día de Pippo (el presentador de este año Pippo Baudo, uno de los más famosos de la televisión italiana); último día de Sanremo en versión nacional-popular; último día de una televisión que no existe ya más que en la cabeza de quien piensa que cien niños de la periferia que bailan claqué disfrazados de Fred Astaire es 'un gran momento de televisión'", se lee hoy en el periódico Repubblica.
Pero los análisis se extienden más allá del Festival, ya que de siempre se le ha considerado "un espejo de Italia" y así el mismo periódico destaca que la caída de audiencias puede ser un aviso a los navegantes políticos: "quien sabe si esto no es una advertencia para las elecciones".
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.