El ministro belga de Finanzas, Didier Reynders, ha afirmado que Bélgica se ha comprometido a intercambiar información fiscal y que saldrá "en los próximos meses" de la "lista gris" de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo en Europa (OCDE).

Reynders aseguró que Bélgica mantiene el compromiso de intercambiar información fiscal en el marco de las convenciones internacionales para evitar la doble imposición, algo que va a llevar a cabo en las semanas y meses próximos, recoge hoy el diario "Le Soir".

La (OCDE) difundió tras la cumbre del G20 celebrada en Londres para buscar salidas a la crisis mundial, un nuevo listado que sitúa a Costa Rica, Uruguay, Malasia y Filipinas como los territorios menos cooperantes en materia de información fiscal.

En esa "lista gris" aparecen otros 38 países y jurisdicciones, entre ellos Luxemburgo, Suiza, Austria y Bélgica, que aunque se han comprometido a respetar las normas en esa materia aún no han dado pasos para ello.

"Ya tenemos un acuerdo firmado con los Estados Unidos y he escrito a 48 países miembros de la Unión Europea y de la OCDE para pedirles concluir lo más rápido posible los protocolos para permitir un intercambio de información", señaló Reynders.

Asimismo, indicó que China y Rusia son los siguientes países que ratificarán un protocolo de intercambio de información con Bélgica.

Reynders hizo hincapié en que Bélgica no figura en la lista de paraísos fiscales, sino en la que reúne a los "centros financieros" no cooperativos.

"Según la definición de la OCDE, un paraíso fiscal es un país que aplica una fiscalidad nula o negligente", aseveró.

También recordó que, a partir del 1 de enero de 2010, Bélgica iniciará un intercambio automático de información con los otros estados miembros de la UE, en el contexto de la directiva comunitaria sobre fiscalidad de los ingresos y del ahorro, indica la agencia Belga.

Por último, el ministro belga mostró su extrañeza por que las islas anglonormandas o las Islas Vírgenes americanas no se encuentren en la lista publicada por la OCDE, y señaló que, en su opinión, esa lista fue "muy negociada" entre los diferentes miembros del G20.