El delegado territorial de la Xunta en Ourense, Rogelio Martínez, reveló hoy que el niño de diez años con obesidad mórbida ingresó "más de cuarenta veces" en la UCI, y sostuvo que la administración ha decidido asumir su tutela porque se trata de "un problema médico" más allá de simple sobrepeso.

Martínez, durante la presentación del Salón da Xuventude Megaxove, indicó que el menor permanecerá posiblemente "en observación" durante los próximos días en el Complejo Hospitalario de Ourense, con el fin de llevar a cabo todos los informes médicos y psicológicos pertinentes que determinen su estado de salud actual.

"Le hemos hecho llegar a la familia que la Xunta, lo único que pretende es la mejoría del estado de salud del niño. Estaba enfermo y lo que queremos es que se cure y pueda devolverse a la familia en el menor plazo posible", eso sí, siempre que no entrañe "ningún riesgo" para su salud, añadió Martínez.

Tras una primera valoración, el delegado territorial de la Xunta afirmó que, "aparentemente, el niño está mejor que hace unos meses", si bien aseguró que no se tomará ninguna decisión hasta que los técnicos de Menores "emitan su informe".

El ingreso del niño orensano en un centro tutelado dependerá de su estado de salud, así como de "los avances que haya experimentado a lo largo de este tiempo". Así las cosas, manifestó que el objetivo es "devolverlo cuanto antes a su hábitat natural, ir al colegio con niños de su edad".

En estos momentos, los padres del menor, Luis Montoya y Margarita Gabarres, están imputados por los delitos de desobediencia, por no acatar las órdenes del juez, y de abandono, relativo a la situación prolongada de absentismo escolar, pues, desde 2008, la Fiscalía ha tenido constancia de que el menor no había asistido habitualmente a clase.

Con respecto a la posibilidad de llevar una tutela compartida entre la Xunta y los abuelos del menor, Martínez respondió que la Xunta está dispuesta a estudiarlo, puesto que los abuelos "están dispuestos a ser una familia de acogida".

"Se estudiará el caso a la vista de las solicitudes, de cualquier solicitud que haya y de los informes médicos y de los informes del equipo de menores de la Xunta", indicó Martínez.

No obstante, matizó que la posibilidad de establecer una tutela compartida no deja de ser algo normal en estos casos: "Como cualquier niño tutelado por la Xunta de Galicia. Cualquier familia puede solicitar el acogimiento de ese menor", dijo.

Por otra parte, se refirió a un problema estructural, además del riesgo de salud del menor: "Indudablemente, hay más asuntos que la propia gordura del niño. Hay una estructura familiar deficiente".

El niño orensano con sobrepeso fue entregado ayer a primera hora de la tarde en el Centro de Menores de A Carballeira, después de que la Policía Autonómica lo encontrase en Vilagarcía de Arosa, para su posterior ingreso.

De allí, se le llevó en principio a un centro sanitario privado en el centro de Ourense, y posteriormente al complejo hospitalario público orensano.

El joven llegó a alcanzar un peso de 83 kilogramos, aunque según los familiares ahora pesa 70.