Miquel Nadal, el número dos del ex ministro de Asuntos Exteriores Josep Piqué, en su declaración ante el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno aseguró que no recuerda nada sobre los vuelos de la CIA y del Ejército de Estados Unidos que trasladaron, a través de España, prisioneros a la base estadounidense de Guantánamo, en la isla de Cuba. Ni siquiera tiene memoria de haber recibido el informe calificado de 'muy secreto' que el entonces director general de Política Exterior para América del Norte, Seguridad y Desarme, Miguel Aguirre de Cárcer, declaró en la Audiencia Nacional que le había entregado 'en mano' el 10 de enero de 2002.

El documento informaba al Gobierno de José María Aznar del uso de aeropuertos españoles para el traslado de talibanes presos. Según Aguirre de Cárcer, se lo dio a Nadal para que se lo hiciera llegar al entonces ministro. Añadió que el secretario de Estado le indicó que 'se iba a contestar afirmativamente', aunque ignoraba quién tomó la decisión.

Nadal, secretario de Estado de Exteriores entre marzo de 2000 y julio de 2002, no reconoció este miércoles el informe de Aguirre de Cárcer cuando se lo mostró el juez Moreno. Aseguró no recordar haberlo recibido ni saber si el 10 de enero de 2002 estaba en España.

Pese a no tener conciencia del episodio, sus palabras siguientes parecieron restar verosimilitud a lo declarado por Aguirre de Cárcer. Así, explicó que es 'funcionario de carrera y no es una práctica habitual en la Administración' responder verbalmente a una solicitud escrita, según consta en la transcripción de su declaración como testigo.

Aguirre de Cárcer explicó al juez, el pasado 17 de diciembre, que entregó el informe que había hecho, a partir de la petición oral de autorización que le dirigió Estados Unidos, a Nadal para que se lo hiciera llegar al ministro, ya que creyó que era más una decisión de 'carácter político' que 'técnico militar'. Aún así, al día siguiente remitió una copia de la nota informativa al entonces secretario general de Política de Defensa.

Nadal dijo que 'no consta que ese documento tuviera entrada en su Secretaría'. Además, echó mano del acuerdo de cooperación para la defensa firmado entre España y Estados Unidos. Según él, las naves que no estén permanentemente en las bases españolas deberán notificar con cierta antelación el uso de las instalaciones, salvo en caso de emergencia.

Admitió que en el convenio 'no está previsto' o 'tasado' utilizar bases españolas para el transporte de prisioneros a Guantánamo, porque 'no matiza la carga', aunque 'se presume que EEUU no llevaría carga en los aviones que pudieran comprometer a España'.

Tras precisar que hacía siete años que abandonó el cargo y que no recordaba nada, salvo lo que había leído en prensa, se remitió a la dicho en enero por el actual ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en el Congreso. Es decir, que 'los prisioneros talibanes transportados desde Afganistán eran prisioneros de guerra'.