Este artículo se publicó hace 16 años.
Las operadoras pequeñas piden a la UE que rebaje tarifas móviles
Las empresas pequeñas de móviles instaron el lunes a la Comisión Europea a no diluir ni alargar sus planes para rebajar las tarifas que se cobran las operadoras entre sí.
La comisaria europea de Telecomunicaciones, Viviane Reding, tiene previsto anunciar sus planes para reducir progresivamente estas tarifas hasta alcanzar una rebaja del 70 por ciento en 2011 en las cuotas de terminación o de 'routing' de llamadas.
Considerando todo el sector, las tarifas suponen entre 15.000 y 20.000 millones de euros al año.
Una operadora paga esta tarifa a otra si necesita su red para completar una llamada. Reding cree que los precios son excesivos y que reducirlos rebajará las facturas de los clientes.
Este punto de vista recibió el lunes el respaldo de un grupo de operadoras pequeñas como la francesa Bouyges, la belga Base, la polaca Play o la británica 3, que compiten con grandes como Vodafone, Orange y T-Mobile.
Las nuevas operadoras tienen redes más pequeñas y terminan pagando grandes sumas, que pueden suponer hasta una quinta parte de los beneficios de una compañía grande como Vodafone.
La propia Vodafone y las empresas semejantes afirman que reducir esas tarifas elevaría el precio de los terminales, afectando a los clientes con menos medios, y podría hacer que la gente tuviera que pagar por recibir llamadas, además de por hacerlas.
Si los planes de Reding se aplicaran, las tarifas de terminación se reducirían de más de seis céntimos por minuto a 1,5 ó 2,5 céntimos, según la Comisión.
"Esto sería bueno para el consumidor, y por favor, no teman que algunos clientes no vayan a recibir servicios", afirmó a Reuters el consejero delegado de Base, Libor Voncina.
El grupo de empresas más pequeñas espera que se alcance una cifra de compromiso respecto a los planes de Reding en unos 3 ó 4 céntimos, que en su opinión sería suficiente para forzar un cambio en los modelos de negocio e impulsar la competición.
Sin embargo, temen la presión sobre la comisaria alargue el plazo para introducir esas rebajas, lo que podría acabar con estas empresas, según el director de asuntos regulatorios de Base, Marc van Asbrök.
Un portavoz de Reding apuntó que sus planes se están terminando y que estarán listos el mes que viene.
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