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El pacto en convenios depende del visto bueno de los empresarios

Patronal y sindicatos liman las últimas diferencias para la reforma, aunque persisten resistencias internas de la CEOE, que fija hoy su postura. Las centrales estudian un nuevo contrato para jóvenes con más formación

BELÉN CARREÑO

Una reluciente vajilla presidió ayer, en un vetusto aparador, la enésima reunión entre patronal y sindicatos para culminar la reforma de la negociación colectiva. La foto dice mucho. Es la primera vez que los agentes sociales filtran una imagen así, con los cuatro protagonistas, Juan Rosell, presidente de la CEOE, y su secretario general, José María Lacasa; Cándido Méndez, de UGT, e Ignacio Fernández Toxo, de CCOO, sonrientes y relajados en mangas de camisa. Sólo algunos papeles y los botellines de agua dejan claro que la cita es de trabajo y no un encuentro entre amigos.

Con la foto, los agentes sociales mandan un claro mensaje a sus bases y al Gobierno, pero, especialmente, a los miembros de la CEOE, los más reacios al pacto. El aura es de buen rollo y con la instantánea se intentan aplacar las presiones de los empresarios, que no quieren cerrar el acuerdo porque no ven cambios 'sustanciales' en la reforma.

Las bases del acuerdo final podrían sentarse mañana

Lo cierto es que el pacto está prácticamente cerrado y pendiente de la decisión que tome hoy la Junta Directiva de la CEOE (máximo órgano decisorio entre congresos), que debe mandatar a Rosell para que firme el documento que estime conveniente. Anoche, los vicepresidentes de la CEOE se reunieron en una cena para cerrar la estrategia que debatirán hoy.

Mañana está prevista otra reunión, que se descarta sea la definitiva, pero que sí podría sentar las bases para que, antes de que acabe mayo, se firme de forma oficial un pacto.

A las partes, incluido el Ejecutivo, les urge acabar esta reforma. Inmediatamente después, se han emplazado a hablar sobre tipos de contratación y empleo. Los sindicatos ya empiezan a perfilar el plan de empleo juvenil que comenzarán a discutir con el Gobierno el próximo lunes. La fórmula será similar a la alemana, conocida como escuela-empresa, que conjuga la formación reglada con contratos en puestos de trabajo.

UGT y CCOO rechazan aumentar la edad del contrato de formación

Las centrales rechazan elevar la edad del actual contrato de formación, como pide la patronal, ya que insisten en que las principales bolsas de paro están por debajo de los 25 años. El contrato de formación actual sólo reserva un 15% del tiempo a formación. El sistema alemán conjuga casi al 50% formación y trabajo: el estudiante está muy orientado al mundo de la empresa cuando acaba de formarse y, al tiempo, tiene protección social y una remuneración.

Pero, para profundizar en esta mesa de empleo, se deben despejar los puntos calientes de la reforma de los convenios: la flexibilidad interna y la ultraactividad.

En el primer terreno, patronal y sindicatos discrepan sobre dónde situar jurídicamente los cambios. La CEOE quiere que se enmarque dentro del Estatuto de los Trabajadores, y los sindicatos prefieren que se inserte en cada convenio para un mejor seguimiento, lo que reforzaría el sentido de 'cogobernabilidad', según fuentes de la negociación. Por flexibilidad interna se entendería, por ejemplo, el porcentaje de plantilla que se puede cambiar de turno o de movilidad funcional (a otro puesto de trabajo). Los sindicatos quieren que las comisiones paritarias tengan un fuerte papel en estas medidas.

Respecto a la vigencia de los convenios, los sindicatos se han mantenido firmes en su postura y, por el momento, se ha resuelto que los plazos de denuncia y de negociación de los convenios se decidan ad hoc entre empresa y trabajadores. Si las partes no llegan a un acuerdo se irá al arbitraje, una figura que los empresarios no quieren que se imponga de forma obligatoria. Los sindicatos sólo aceptarán la posibilidad de que un convenio sustituya a otro.

1. Vigencia de los convenios

Los convenios colectivos de empresa no decaerán, es decir, un acuerdo laboral vigente tendrá que ser obligatoriamente sustituido
por otro nuevo.

2. Flexibilidad interna

Se podrán cambiar las condiciones de trabajo de un porcentaje de la plantilla de una empresa en función del tamaño de la compañía.

3. Convenios de empresa

Se permitirá abrir un convenio de empresa aunque exista otro de alcance sectorial o provincial. Esta era una de las principales reivindicaciones de Anfac, la patronal de fabricantes de coches, que dice que ha sido clave para traer nuevos modelos a España.

4. Comisión paritaria

Para intentar desjudicializar los conflictos surgidos en materia de convenios, se otorgará un papel más relevante a las comisiones paritarias y al arbitraje entre las partes. 

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