Rusia propone hablar sobre la lucha contra el terrorismo internacional durante la cumbre del G8 que se celebrará hoy y mañana en Camp David (EEUU), y en la que estará representada por el primer ministro, Dimitri Medvédev.

"Durante los preparativos de la cumbre propusimos incluir en la agenda de asuntos a debatir la lucha contra el terrorismo internacional", informó hoy el Gobierno ruso en un comunicado.

Medvédev viaja a Estados Unidos en sustitución del presidente Vladímir Putin, quien justificó su inesperada ausencia debido a las intensas consultas que mantiene para la formación del nuevo Gobierno, según las agencias rusas.

La agenda de la cumbre se centrará en los conflictos de Siria, Irán y Corea del Norte, la no proliferación de armas de destrucción masiva, la seguridad alimentaria, la defensa del medioambiente y la situación económica global.

Al respecto, Rusia acusa a Occidente de armar a las fuerzas rebeldes en Siria y de alentar sus actividades terroristas para derrocar al régimen de Bachar al Asad, como ocurriera en Libia con el dictador Muamar el Gadafi.

Además, mantiene su oposición a aprobar en el Consejo de Seguridad de la ONU cualquier resolución que permita la injerencia exterior en el país árabe.

Precisamente, el Kremlin adelantó hoy que se opondrá a la aprobación de una declaración durante la cumbre que incluya "llamamientos unilaterales" contra el régimen sirio.

En cuanto a Irán y Corea del Norte, Moscú defiende el derecho de ambos países a un programa nuclear pacífico y aboga por la reanudación de las negociaciones multipartitas.

En materia económica, Rusia insta a acelerar la reforma de las instituciones financieras internacionales para adaptarlas a la nueva realidad económica, en la que cuentan con un papel cada vez más creciente los países emergentes.

Medvédev, que asumió la jefatura del Gobierno el 8 de mayo después de ocupar la presidencia durante cuatro años (2008-12), se reunirá con el presidente norteamericano, Barack Obama.

Esta semana Medvédev mantuvo consultas con Putin sobre la cumbre y la reunión con Obama, en la que se abordarán asuntos bilaterales, pero no las actuales discrepancias sobre el despliegue del escudo antimisiles en Europa.

La ausencia de Putin, quien ha criticado duramente a Occidente por su política intervencionista, fue interpretada por algunos analistas como un desplante a Washington, aunque la Casa Blanco le restó importancia.

Putin, que presidirá el Kremlin hasta 2018, tiene previsto reunirse con Obama durante la cumbre del G20 que se celebrará en México el 18 y 19 de junio.