Tener coche es caro e imprescindible en algunos casos. En otros muchos, ungasto desproporcionado en comparación con la necesidad de su uso. Por ello, tiene poco sentido económico invertir alrededor de 20.000 euros en un medio de transporte para tenerlo aparcado unas veintitrés horas al día.

La solución económica ideal sería compartirlo entre personas con necesidades complementarias: que no lo necesitaran a las mismas horas, y cuyos puntos de partida y destino sean cercanos. Así se reparten los gastos fijos: la depreciación, los impuestos, el seguro y el aparcamiento.Los vehículos pueden gestionarse mediante una cooperativa o una agencia externa propietaria de los coches. Este invento existe en muchos países. Suiza, con 7,5 millones de habitantes y 70.000 abonados, se halla a la cabeza. Por el contrario, en España, el carsharing está poco implantado.

Una empresa catalana, Avancar Carsharing, de propiedad pública mayoritaria, ofrece este servicio desde 2005. En total, tiene 75 coches y 1.100 clientes en Barcelona Granollers, Sabadell y Sant Cugat

Cambio de mentalidad

El gerente de Avancar, Josep Sala, asegura que su umbral de rentabilidad está en 2.000 clientes, cifra que espera alcanzar en un año. "Estamos satisfechos con nuestros resultados, si bien nuestras expectativas iniciales no se han cumplido. El carsharing requiere un cambio de mentalidad y en España el coche es un símbolo de estatus muy arraigado. Cambiar la mentalidad lleva tiempo".

El cliente medio de Avancar Carsharing realiza desplazamientos de entre 120 y 140 km. cada vez que utiliza el coche. En total, unos 2.000 al año con los coches compartidos.La empresa obliga a dejar el coche en el mismo lugar que se recoge, modalidad que facilita la logística, pero que limita las posibilidades de intercambio.

Según la Asociación Nacional de Entidades Financieras, el préstamo medio a particulares para la adquisición de un vehículo sobrepasó los 15.000 euros en diciembre de 2006. Un préstamo al consumo para esta cantidad, a cuatro años y a un 7% TAE, supone unas cuotas superiores a 350 euros al mes, que hay que pagar incluso sin mover el coche.

Los números cantan

La tarifa básica de Avancar está fijada en 30 euros al año. Por esta cantidad, con la tarjeta de socio, se puede llegar a uno de los veintiún aparcamientos que tienen fijados en Barcelona y utilizar el coche. Esta tarifa sólo le interesa a quien vaya a usarlo esporádicamente.

Asimismo, hay otras modalidades en las que se incrementa la cuota anual, y se logra reducir el coste diario y por kilómetro. Quizá no sea éste un sistema adecuado para quien necesite vehículo todos los días, pero sí para el que esté pensando en prescindir de un segundo coche o como alternativa ocasional al transporte público.