Noche y Día

Director: James Mangold
Género: Acción
Reparto: Tom Cruise, Cameron Diaz, Jordi Mollá
Duración: 105 minutos

En síntesis

Un encuentro fortuito en un aeropuerto unirá los destinos de un agente secreto (Roy Miller, interpretado por Tom Cruise), que busca proteger un prototipo de batería eterna de las ambiciones de unos narcotraficantes, y una joven solitaria (June Havens, interpretada por Cameron Diaz). Sus aventuras los llevarán a visitar más países que Phileas Fogg y el baúl de la Piquer juntos. Peripecias exóticas hollywodienses para todos los públicos.

Comentario

En los años sesenta del pasado siglo, el gran cineasta Stanley Donen rodó dos divertimentos en homenaje a Alfred Hitchcock: Charada (1963) y Arabesco (1966). Noche y día es, claramente, un loable y entretenido guiño a ese tipo de comedia de aventuras, en el que las carreras más enloquecidas conviven con el romanticismo más disparatado. Esta última parte, la del corazón, funciona más o menos bien en la película, en buena parte porque la especialidad de la actriz Cameron Diaz es hacer de boba sonriente y da absolutamente igual a quién le pongan delante. Respecto a las escenas de acción, más allá de los excesos propios de un blockbuster, se agradece que, por una vez, haya un director de acción pos-Matrix, James Mangold, que no tire todo el santo rato de cámara súper mega lenta… El problema básico del filme, sin embargo, radica en su protagonista masculino. Así como el Cary Grant que aparecía en Charada tenía el punto justo de encanallamiento, nadie, absolutamente nadie, puede creerse que detrás de esas asombrosamente fundas blancas de dientes que luce Tom Cruise pueda esconderse una persona con dobleces. Más que un héroe de acción, parece el rostro de un anuncio de seguros, lo que va en detrimento del suspense y aburre al espectador casi tanto como la pasión de Cruise por reconvertirse en el nuevo Halcón callejero: desde Top Gun (Tony Scott, 1986), el muchacho se ha especializado en rodar escenas moteras y aquí riza el rizo con dos justo al principio y al final del filme.

Sevilla, Navarra

Definitivamente, Tom Cruise le tiene (mucha) manía a Sevilla. Si en Misión Imposible (John Woo, 2000) hizo que las fallas valencianas transcurrieran en la capital hispalense, ahora ha conseguido lo nunca visto: un encierro sanferminero en mitad del barrio de Triana. ¡Atiza! Vale, quizás la cosa no es tan de traca como en el filme anterior pero canta por bulerías. Al paso que vamos, para su próximo filme igual se baila una sardana alrededor de la Torre del Oro. Mejor no dar ideas...

Cuestión de promoción

Noche y día es uno de esos casos que se estudian más tarde en las academias de publicidad. Por lo visto, la compañía Fox realizó una campaña promocional de lo más agresiva en EE UU. Según sus responsables, es una película destinada al público adulto, a lo que se consideran “los viejos aficionados”. Señal de que además de la gallina de los huevos de oro del 3D, algo se está moviendo en Hollywood para conseguir salvar a la industria. La cosa no salió precisamente bien: ha sido la película de acción de Tom Cruise que ha recaudado menos dinero en las últimas dos décadas. Así están las cosas.