PARÍS.- El suizo Joseph Blatter, suspendido de la presidencia de la FIFA, considera a partir de las filtraciones sobre la instrucción que la Comisión de Ética le va a condenar y que tiene dos posibilidades, que le impongan una suspensión de dos años acompañada de una multa de 160.000 francos suizos, o de por vida.

En una entrevista publicada este miércoles por varios periódicos europeos, el francés Libération, el español Mundo Deportivo y el italiano Gazzetta dello Sport, Blatter se queja de las filtraciones en la prensa de las conclusiones de la sala de instrucción de esa comisión de ética de la FIFA.

Y recuerda que cuando él mismo creó ese órgano en 2004 se estableció que el comité de disciplina debía suspender a los miembros de la comisión de ética que no respetaran las reglas de confidencialidad.

Reitera que pretende ejercer su derecho a defenderse, por lo que este jueves acudirá a declarar al Comité Ético de la FIFA: "Quiero que me escuchen, que sepan mi verdad. He sido condenado antes de poderme defender".

Sobre el fondo del asunto, la acusación de corrupción que pesa sobre él y sobre el francés Michel Platini, el suizo ha vuelto a explicar cómo fue la colaboración entre ambos y por qué espero hasta 2011 para pagar los dos millones de francos suizos que le reclamaba el presidente de la UEFA.

Además, replica que en el fútbol no ha hecho nunca "algo que debiera reprocharme en el terreno de la consciencia o en el terreno del derecho. Puedo ir ante cualquier tribunal con la conciencia tranquila".

Preguntado sobre qué pretende a su juicio el Comité de Ética a la que tanto él como Platini descalifican por su procedimiento, dijo no saber si lo que pretende es impedir al hasta ahora responsable de la UEFA ser elegido presidente de la FIFA o darle "una patada" a él. 

"No sé quien es la mano que mece la cuna y si hay alguien detrás o no, si buscan impedir que Michel Platini sea presidente de la FIFA o me quieren colgar una piedra al cuello y tirarme al agua. O las dos cosas a la vez", añade.

Reiteró que considera a Platini "un hombre honrado" y negó que hubiera habido un acuerdo entre ambos para que Blatter tuviera un nuevo mandato al frente de la FIFA en 2011 y luego le dejara vía libre para que el francés tomara las riendas.