Escuchando el discurso de Dusko Ivanovic, nadie diría que su equipo, el vigente campeón de la ACB, está a un paso de ser eliminado de la lucha por revalidar su título. Alejado de sus habituales férreas maneras, el técnico del Baskonia desdramatiza con tanto convencimiento el 2-0 con el que el Barcelona comanda las semifinales después de su nueva exhibición de ayer, que algo chirría entre lo visto y lo oído en el Palau. 'Las estadísticas no reflejan la realidad de la cancha. Veo claro que podemos ganar al Barça y también la manera de hacerlo', asegura el montenegrino, pese a los 16 puntos de desventaja en la segunda derrota consecutiva frente a los azulgrana. 'El Baskonia se maneja bien en la heroica y es cierto que ganar el partido nos ha costado más de lo que puede parecer', conviene Xavi Pascual. 'Tienen razones para creer, pero nosotros también', añade el técnico del Barcelona, feliz con los suyos.

Si Ivanovic tiene la fórmula para desmontar a sus muchachos, tendrá que hacerla funcionar este miércoles en el Buesa Arena para evitar despedir el curso con el mismo 3-0 con el que su equipo arrasó al Barça en la final del curso pasado. Por más que el Baskonia se maneje bien en el alambre y esgrima el plus que siempre le ofrece su apasionada afición, encadenar tres victorias frente a los azulgrana, con partido final en el Palau, requiere un canto a la heroicidad: ningún equipo lo ha logrado antes en unas semifinales.

Más allá de la estadística, el Barça cuenta con un abanico de recursos tan grande que Xavi Pascual pudo permitirse el lujo de dar descanso a Navarro en la mitad del partido de ayer, sin que su equipo se resintiera. Los once jugadores restantes completaron una actuación tan coral que todos acabaron con puntos y rebotes -Lakovic fue el único que no sumó ninguna captura- en sus estadísticas, mientras los suplentes del Baskonia reducían su aportación a siete únicos puntos en los 40 minutos.

La defensa del Barça fue tan efectiva que Teletovic no anotó sus primeros puntos hasta mediado el segundo cuarto, cuando los azulgrana amasaron su ventaja (37-29); San Emeterio no entró en partido hasta el tercero y los vascos sudaron para alcanzar los 60 puntos en todo el partido. Sada minimizó los daños que causa Marcelinho, y este, cargado de faltas como Barac, no pudo rentabilizar las opciones (49-47) que, pese a todo, tuvo su equipo. La mano de Lakovic y el arreón final de Perovic zanjaron el asunto, y el campeón aparece hoy en auténtico jaque, pero respondón.