Los más de cien detenidos a raíz de los incidentes derivados de la celebración del título de Liga del FC Barcelona han quedado en libertad con cargos, a la espera de ser citados por el juez para responder de los hechos que se les imputan.

Según han informado los Mossos d'Esquadra, durante todo el día de ayer se tomó declaración a los 104 detenidos en sede policial y, posteriormente, fueron puestos en libertad sin pasar a disposición judicial, en la mayoría de casos acusados de desórdenes públicos y atentado a los agentes de la autoridad.

Han sido acusados de desórdenes públicos y atentado a los agentes de la autoridad

Los detenidos, que deberán acudir ante el juez cuando los cite para juzgarlos por las faltas o delitos imputados, vuelven a la calle la víspera de la final de la Copa del Rey, que se celebrará en Barcelona y que ha obligado a los Mossos d'Esquadra a preparar un dispositivo de seguridad ante el riesgo de incidentes.

Los 104 imputados por los alborotos fueron detenidos la madrugada del domingo al lunes, tras una batalla campal desatada en el centro de Barcelona a partir de la medianoche, cuando algunos de los congregados en la celebración empezaron a subirse a un andamio, frente a la fuente de Canaletes, y a quemar trozos de una lona.

Simultáneamente, otros de los asistentes se dedicaron a dañar mobiliario urbano y a lanzar objetos a los policías, como piedras y botellas de vidrio, por lo que los agentes de los Mossos y de la Guardia Urbana tuvieron que intervenir, lo que derivó en unos enfrentamientos que se saldaron con 119 heridos, 32 de ellos agentes de los Mossos y la Guardia Urbana.

En los actos de celebración del título de Liga del FC Barcelona participaron la noche del domingo más de 40.000 personas, que se congregaron entre la Rambla, la plaza Catalunya y las calles adyacentes.