Este artículo se publicó hace 4 años.
La suspensión de dividendos de Bankia y Aena priva al Estado de más de 2.000 millones
Debido a la crisis del coronavirus, el banco ha decidido no repartir un dividendo extraordinario de 2.500 millones y el gestor aeroportuario ha aplazado de momento el reparto de sus beneficios.
Vicente Clavero
Madrid-
La crisis desencadenada por el coronavirus ha obligado a muchas empresas a revisar sus planes. Esa revisión afecta en algunos casos a la política de remuneración de los accionistas. Dividendos que ya habían sido anunciados están ahora en suspenso, al menos hasta que la economía vuelva a su cauce.
Así sucede, por ejemplo, con Bankia y con Aena, ambas participadas por el Estado, que de momento va a quedarse sin percibir 2.102 millones de euros.
Bankia tenía previsto distribuir dos dividendos: uno ordinario con cargo al ejercicio de 2019 y otro extraordinario para reducir su excedente de capital. El primero de ellos (0,11 euros por acción) supondría el pago a los accionistas de un total de 355 millones. El importe del segundo ascendería a 2.100 millones de euros adicionales.
En la Junta celebrada el 27 de marzo por medios telemáticos, se decidió mantener el ordinario, pero no así el extraordinario.
Eso supone que el Estado, cuya participación en la entidad a través del FROB es del 61,77%, iba a embolsarse 1.741 millones. Pero finalmente sólo se va a llevar 219, que se suman a los 995 obtenidos desde que Bankia empezó a repartir dividendos en 2014.
En conjunto, el Estado ha recuperado por ese procedimiento 1.214 millones de euros, frente a los 22.424 millones de ayudas públicas que Bankia recibió entre 2010 y 2013 para evitar su quiebra.
Aparte, Bankia ha llevado a cabo dos colocaciones, una en febrero de 2014 y otra en diciembre de 2017, representativas del 7,5% y del 7% de su capital, respectivamente, con las que se han recuperado otros 2.122 millones de euros.
Aun así, la cifra resultante no llega al 15% de las ayudas, y menos todavía si a las de Bankia se añaden los 1.645 millones que el Estado aportó al saneamiento de BMN. Ambos bancos están fusionados desde enero de 2018 y su valor en Bolsa al cierre del año pasado ascendía a 5.840 millones de euros.
En el caso de Aena, el reparto del dividendo se ha aplazado hasta comprobar el impacto que la crisis del coronavirus tiene en sus cuentas. El plan era distribuir 1.153 millones con cargo a 2019, de los que 588 millones correspondían al Estado por el 51% que tiene del gestor aeroportuario a través de la empresa pública Enaire.
Desde su privatización parcial en febrero de 2015 por el Gobierno de Rajoy, AENA ha repartido más de 3.000 millones de euros en dividendos.
Un 49% de esa cifra ha ido a parar al bolsillo de los inversores que aprovecharon su salida a Bolsa para tomar posiciones en un negocio muy suculento, que año a año arroja pingües beneficios.
Entre ellos figuran el fondo británico TCI, el banco HSBC y Deutsche Bank, así como miles de accionistas minoritarios. AENA tenía a 31 de diciembre una capitalización de 25.575 millones de euros, casi el triple del valor que se le adjudicó cuando empezó a cotizar (8.700 millones).
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.