El líder de Vox, Santiago Abascal, ha pedido este martes a la Policía que “no obedezca órdenes ilegales” en las manifestaciones contra sedes del PSOE y ha instado a los agentes a rebelarse contra la Delegación del Gobierno en Madrid, el Ministerio del Interior y el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.

En el marco de las protestas que se han producido esta semana en varias sedes del PSOE en España, principalmente en la de Ferraz (Madrid), el líder de Vox consideró “órdenes ilegales” que las fuerzas de seguridad contuvieran a un grupo de manifestantes ultras que intentaron asaltar la sede socialista rompiendo el cordón policial al grito de “¡A por ellos!”.

Abascal ha defendido como “legal y pacífica” la protesta de este lunes, que se saldó con tres detenidos por desobediencia y atentado contra la autoridad, tras intentar saltar el cordón policial y acceder a la sede socialista.

Grupo de asistentes, algunos encapuchados y ataviados con máscaras, encendieron bengalas, petardos y lanzaron botes de humo al grito de “¡Ni un paso atrás!” o “la sede del PSOE la vamos a quemar”.

Interior defiende la actuación de la Policía en Ferraz

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido este martes la actuación de la Policía Nacional ante la sede del PSOE en la calle Ferraz y ha garantizado que, por lo menos desde que ocupa el cargo, las fuerzas de seguridad “no obedecen ningún criterio político”, sino operativo.

“Me molesta muchísimo que alguien ponga en tela de juicio la profesionalidad de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, en este caso de la Policía Nacional”, ha indicado antes de subrayar que los agentes actúan siempre con criterios de “profesionalidad, necesidad y, por tanto, de legalidad”.

Y ha insistido en su llamada a “la derecha y la ultraderecha” para que tengan un discurso claro en favor de la paz y la sensatez, porque lo ocurrido este lunes, el “acoso” a la sede del PSOE y la “coacción”, “no cabe en una democracia”.

Grupos neofascistas y falangistas en Ferraz

Entre los asistentes a las manifestaciones, además del propio Abascal y el vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, se encontraban miembros de grupos neofascistas y falangistas.

“Pactan con terroristas, golpistas, ponen a los patriotas en la cárcel mientras negocian el gobierno de España con Otegi, Puigdemont y compañía. Un puñado de patriotas y falangistas lo vamos a intentar impedir aunque nos cueste la cárcel o nos cueste la vida”, afirmaba este lunes por la noche desde el exterior de la sede del PSOE el ultraderechista Manuel Andrino, jefe nacional de Falange.

Según ha podido verificar Público, entre los participantes en estas acciones están también los neofascistas de España 2000 que lidera el abogado valenciano José Luis Roberto.

“Desde España 2000 estaremos en cualquier lugar y en cualquier momento como parte de la protesta activa ante el crimen que se pretende. Y decir ‘activa’ es tensar la cuerda hasta el máximo para intentar que no se produzca la traición a España. Son tiempos de implicarse, de definirse, de actuar y de unirse”, escribió Roberto en su calidad de presidente nacional de esta formación.