La Comunidad de Madrid va a promover una normativa que supondrá una liberalización casi absoluta de los horarios comerciales. El Gobierno de Esperanza Aguirre prepara un anteproyecto de ley que permitirá a los locales de hasta 750 metros cuadrados abrir 24 horas al día, todos los días del año. Supone extender una norma que hasta ahora se aplica a negocios de hasta 300 metros cuadrados.

El proyecto, cuya aprobación está prevista para antes de 2012, también dará libertad total a las grandes superficies que dediquen más del 50% de su oferta a venta de muebles, decoración, bricolaje, artículos de construcción, vehículos, juguetes y artículos deportivos. Asimismo, se simplificarán los trámites administrativos para abrir un comercio: en lugar de esperar a la licencia municipal preceptiva, se podrá obtener una autorización provisional.

Aguirre persigue 'seguir profundizando' en la liberalización de la actividad comercial en la región, 'e introducir incentivos para que esta actividad siga con el mismo éxito de los últimos años', según el vicepresidente y portavoz, Ignacio González, partidario de 'atender la demanda de los ciudadanos'. Madrid, la región con más libertad de horarios, ya permite actualmente abrir todos los domingos y festivos del año a los comercios ubicados en Puerta del Sol, el aeropuerto de Barajas, Castellana, Cortes y Palacio.

El anuncio generó reacciones contrapuestas. La Confederación de Comercio de Madrid (Cocem) reclamó el consenso de todas las partes y la asociación de consumidores Facua y la Confederación Española de Comerciantes expresaron su rechazo.

Salvador Santos Campano, presidente de la Confederación madrileña de Empresarios de Comercio Minorista, Autónomos y Servicios (Cecoma), valoró, en una charla en Público.es, que se implante la licencia de apertura exprés y confió en que la medida no afecte a 'grandes superficies', entre las que citó a El Corte Inglés, Mercadona, Carrefour o Zara. La patronal de grandes superficies, Anged, aplaudió la iniciativa, calificada por el presidente de la Cámara de Comercio de Madrid y vicepresidente de CEOE, Arturo Fernández, de 'muy positiva'. CCOO cree que afectará 'gravemente' a los trabajadores del sector.