La activista Aminatu Haidar ha acusado a Marruecos de 'querer iniciar una guerra civil' entre el pueblo saharaui y marroquí, y ha advertido de que la comunidad internacional sigue con 'los ojos cerrados' respecto a la situación de su pueblo.

Haidar, que ha llegado hoy a Portugal para recibir una distinción de la Universidad de Coimbra por su labor en favor de los derechos humanos, se mostró muy preocupada por el desmantelamiento del campamento de protesta de Gdaim Izik, cerca de El Aaiún.

La activista ha considerado que esta acción supone un 'paso atrás' para la resolución del conflicto y describió un panorama 'desolador' por lo sucedido allí.

'El Consejo de Seguridad tiene que actuar y presionar a Marruecos en defensa de los derechos humanos' Haidar ha lamentado que los enfrentamientos contra las milicias marroquíes se saldaron con la muerte de un saharaui así como 'muchos heridos y desaparecidos' y la destrucción del campamento de Gdaim Izik, donde vivían cerca de 25.000 saharauis en unas 7.000 jaimas.

Las autoridades de Marruecos informaron de la muerte de dos agentes y setenta heridos durante la operación, mientras que el Frente Polisario confirmó al menos un fallecido y centenares de heridos.

'El Consejo de Seguridad (de la ONU) tiene que actuar y presionar a Marruecos en defensa de los derechos humanos del pueblo saharaui', pidió la activista.

Haidar ha dicho no tener conocimiento de la reunión anunciada hoy entre el Frente Polisario y Marruecos para reanudar el proceso de negociación sobre la soberanía del Sahara Occidental y ha señalado que su mayor preocupación en este momento es lo que está sucediendo en el campamento.