Los restos mortales de los dos militares españoles fallecidos en el atentado de Afganistán han llegado esta tarde a la base aérea de Gando (Gran Canaria), donde los esperaban familiares y diversas autoridades.

Los féretros del sargento Manuel Argudin Perrino y la soldado Niyireth Pineda Marín han llegado pasadas las 17:30 hora local en el avión de la Fuerza Aérea Española. En él viajaban la ministra de Defensa, Carme Chacón, y el jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general José Julio Rodríguez, quienes fueron los primeros en baja del aparato para prestar inmediatamente sus respetos a las familias. 

Los féretros descendieron del Airbus A3 envueltos en banderas de España y abandonaron la pista en 2 coches fúnebres escoltados por un coche de la Guardia Civil. En la misma pista de aterrizaje se ha celebrado un breve y discreto acto que ha consistido en una recepción con honores militares y un responso religioso.

Los dos féretros han sido trasladados a hombros por sus compañeros a sendos coches fúnebres que los conducían al Instituto Anatómico Forense donde se les practicarán las autopsias. Está previsto que una vez se cumpla este trámite legal, los restos mortales de ambos militares se trasladen a la Base General Alemán Ramirez, sede del acuartelamiento en La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, base central de la Brigada de Canarias, donde pertenece la unidad a la que servían los fallecidos.

El artefacto era el explosivo más potente utilizado nunca contra las tropas españolas

Allí se instalará una capilla ardiente y posteriormente, a las 10 horas locales, se oficiará el funeral, que presidirá el príncipe Felipe, y que contará con la asistencia de la ministra de Defensa y el JEMAD, además de distintas autoridades civiles y militares locales y autonómicas, entre ellas el presidente del Gobierno de Canarias en funciones, Paulino Rivero. Está previsto que el príncipe imponga a título postumo la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo, la máxima condecoración para acciones bélicas, a los dos militares fallecidos en el atentado de ayer.

Fuentes de la investigación han confirmado que el artefacto explosivo utilizado en el atentado tenía una carga 'como mínimo' de 30 kilogramos de explosivo. Se trata del más potente explosivo utilizado contra las tropas españolas en la historia. Las primeras investigaciones deducen que por los primeros análisis, el tamaño del cráter y los daños causados al vehículo Lince, como mínimo la carga explosiva superaba los 30 kilogramos.

La explosión también dejó heridos a tres soldados, a los que un Boeing 707 con equipos médicos a bordo trasladará a España. Está previsto que el avión llegue a Herat esta madrugada y posteriormente emprenderá vuelo de regreso con los tres soldados heridos: Ruben Velazquez Herrera, Jhony Alirio Herrera Trejos y Roi Villa Souto. Alirio se encuentra estable dentro de la gravedad, mientras que los otros dos se recuperan de las heridas, según los médicos que les atienden.