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Amazon Paralizan en Sudáfrica un proyecto de sede de Amazon en tierra indígena

El terreno -propiedad actualmente del fideicomiso Liesbeek Leisure Properties- es uno de los pocos sitios que quedan sin urbanizar de los antiguos pastos que usaban los antepasados indígenas en el verano y es un lugar en el que aún se realizan ceremonias y reuniones relacionadas con su tradición ancestral.

'Khoigoed' o African Sage se quema ritualmente, especialmente para las ceremonias de curación o limpieza, antes de que cientos de personas, que incluyen a Khoi y otras Primeras Naciones, activistas ambientales y cívicos, marchen por las calles de la ciuda
Activistas ambientales y cívicos marchan por las calles de la ciudad de Ciudad del Cabo el 16 de junio de 2021 para protestar contra el nuevo edificio propuesto por Amazon  RODGER BOSCH / AFP

La Justicia sudafricana ha ordenado paralizar la construcción de un gran proyecto urbanístico en Ciudad del Cabo que tenía como principal núcleo una sede y almacén de la compañía Amazon, por estar sobre terreno sagrado para las comunidades khoi y san (grupos étnicos indígenas originarios de Sudáfrica).

Según divulgó este domingo la prensa local, la jueza sudafricana Patricia Goliath ordenó la paralización del proyecto al entender que antes de emprender el proyecto no se tuvieron en cuenta los derechos de las comunidades implicadas.

"Este asunto, en última instancia, concierne a los derechos de los pueblos indígenas. El hecho de que el proyecto tenga beneficios sustanciales económicos, de infraestructuras y públicos no puede anteponerse a los derechos fundamentales de los pueblos de las primeras naciones", señaló la magistrada en su veredicto, emitido el viernes pero divulgado este domingo por medios como el portal IOL.

Goliath puntualizó, sin embargo, que el suyo no es un dictamen en contra del proyecto en sí, sino una medida que atiende a la necesidad de consultar a los khoi y san apropiadamente.

El emplazamiento elegido para este proyecto -valorado en 4.500 millones de rands (unos 272 millones de euros)- en el distrito de Observatory en Ciudad del Cabo (suroeste de Sudáfrica) arrastra polémica desde su anuncio.

Según las comunidades khoi y san, el terreno -propiedad actualmente del fideicomiso Liesbeek Leisure Properties- es uno de los pocos sitios que quedan sin urbanizar de los antiguos pastos que usaban sus antepasados en el verano y es un lugar en el que aún se realizan ceremonias y reuniones relacionadas con su tradición ancestral.

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