El pasado lunes, una mujer de 28 años acudió a la comisaría del suburbio ateniense de Hagios Anaryirios (Grecia) junto a una amiga para pedir ayuda. Su expareja, según explicó a los agentes, llevaba varios días rondando su domicilio. La joven rogó protección para volver a casa, pero los policías le indicaron que debía llamar al Grupo de Acción Rápida para que pusieran a su disposición un coche patrulla. Entonces, salió de la comisaría y, mientras hablaba por teléfono con este servicio, el hombre de 39 años la apuñaló hasta matarla.

Ahora, la Policía griega ha abierto una investigación interna contra los seis agentes que presuntamente negaron ayuda a la víctima, pocos minutos antes de que fuera asesinada, tal y como ha informado el Gobierno del país. 

El ministro de Protección Ciudadana, Mijalis Jrisojoidis, responsable de la Policía, ha señalado este jueves que está "devastado" por el caso y ha asegurado que la investigación se está llevando a cabo "a gran velocidad". La Fiscalía, por su parte, ha ordenado también una investigación sobre las posibles responsabilidades penales de los agentes.

Según la prensa local, entre los agentes que fueron relevados de sus puestos y trasladados a otros departamentos, se encuentra también el comandante de dicha comisaría. El agresor tenía antecedentes por violencia contra funcionarios públicos y posesión de drogas.

Sin embargo, pese a que antes de que se produjera el feminicidio la mujer señaló que su expareja "era violento" y tenía "problemas psicológicos", los policías le dijeron que debía presentar una denuncia contra él o solicitar ella misma por teléfono un coche patrulla.

En un vídeo publicado este miércoles por la emisora MEGA se observa como la mujer habla por el móvil frente a la comisaría para pedir esa escolta policial, cuando reconoce al agresor dirigiéndose a ella. Las imágenes muestran cómo el hombre le alcanza y la apuñala mortalmente varias veces. Entre los policías investigados, se encuentra también el agente que habló por teléfono con la víctima y justo antes de ser apuñalada le dijo que "un coche patrulla no es un taxi".

Hasta el momento, no obstante, ninguno de los policías ha sido suspendido, ya que, según la portavoz, para que esto pueda suceder tienen que finalizarse primero "ciertos procedimientos disciplinarios". Otra mujer también denunció en la emisora MEGA que hace dos años se presentó llena de moretones y marcas en la misma comisaría para denunciar la paliza que había recibido de su marido y los agentes le dijeron que se fuera a casa.