El número de civiles muertos en Irak cayó en 2009 a la mitad con respecto al año anterior, a unos 4.500, pero las mejoras introducidas en el programa de seguridad se han desacelerado y los atentados a gran escala se han cobrado una gran cantidad de víctimas, según un estudio.

El grupo de derechos humanos Iraq Body Count (IBC) dijo que el total de muertes civiles se elevó a 4.497 hasta el 16 de diciembre, el menor número desde la invasión del país en 2003 y la mitad que en 2008, cuando la cifra ascendió a 9.226.

Al contrario de lo ocurrido en 2008, la caída en el número de muertes violentas se detuvo, dado que en el primer y segundo semestre del año tuvieron cifras similares, dijo el grupo en un informe.

Según las cifras del Ejército de Estados Unidos, el pico de violencia se alcanzó hacia finales de 2006 y principios de 2007, cuando se registraban unos 1.700 ataques por semana. Eso está muy lejos de lo visto en el verano de 2009, con unos 200 ataques por semana.

Hacia finales de 2006 y principios de 2007 se se registraban 1.700 ataques por semana

Sin embargo, el informe aún destaca tendencias preocupantes, como la subida en la cifra de muertes por grandes atentados con más de 50 civiles muertos en cada uno. En 2008 murieron 534 personas en nueve de esos ataques frente a las 750 fallecidas en ocho incidentes en 2009.

'Irak está sufriendo claramente más violencia diaria por parte del terrorismo y la inestabilidad que cualquier otro país, una violencia más considerable incluso que Afganistán y Pakistán', afirmó John Sloboda, portavoz y co-fundador de IBC.

Las cifras de IBC, que están basadas en cuentas cruzadas de medios de comunicación e informes de hospitales, morgues y grupos de la sociedad civil, sitúan el número de muertes civiles desde la invasión de 2003 en entre 94.939 y 103.588.

Esos números son mucho más que los que ha dado el Gobierno iraquí. El jueves, el Ministerio de Sanidad dijo que 306 civiles murieron en diciembre, lo que llevó el total de civiles muertos por la violencia a 2.773 el año pasado.

Unos 3.700 soldados extranjeros han muerto en combates en Irak desde que comenzó la guerra, según www.icasualties.org, que hace un seguimiento a las víctimas en ese país y en Afganistán.

Esa cifra también ha caído de forma sustancial, debido a que los soldados estadounidenses que aún están en la zona se mantienen más tiempo confinados en sus bases y porque las fuerzas iraquíes han tomado el control en la seguridad.