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¿El fin de la policía de la moral iraní?: ejecuciones, bloqueo de cuentas y otras medidas para reprimir las protestas

El Gobierno ha planteado congelar los fondos de las mujeres que no cumplan las políticas de vestimenta y planea sustituir al cuerpo de control por nuevas tecnologías.

Una mujer junto a un mural con la bandera iraní y el ayatolá Ruholá Jomeini en Teherán (Irán). Imagen de Archivo.
Una mujer junto a un mural con la bandera iraní y el ayatolá Ruholá Jomeiní en Teherán (Irán). Imagen de Archivo. DANI SALVÀ / VWPICS / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO / Europa Press

Tras casi tres meses de protestas, más de 400 muertos y miles de detenidos, según las organizaciones, el Gobierno iraní se mantiene reticente a los cambios exigidos por los manifestantes. Si bien han anunciado el fin de la policía de la moral, todo apunta a un cambio de metodología para vigilar que se cumplen las normas de vestimenta impuestas, entre las que se mantiene la obligatoriedad del velo islámico.

El Centro de la Promoción de la Virtud y Prohibición del Vicio de Irán anunciaba este lunes "que la misión de la Policía de la moral ha terminado", pero se están "tomando decisiones acerca de la castidad y el velo, para que, si Dios quiere, se apliquen en un marco más moderno, con el uso de nuevas tecnologías", matizaba su portavoz, Ali Janmohamadí.

Todo apunta a que el posible fin de la policía de la moral no es más que un cambio en la forma de control para que se cumpla el código de vestimenta. Las autoridades locales ya usan sistemas como las cámaras de tráfico para multar a mujeres que conducen sin el velo, con castigos como penas de hasta dos meses de cárcel.

Las revueltas iniciadas por la muerte de Mahsa Amini tras ser detenida por la policía de la moral por no llevar bien puesto el velo reclaman el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979, quien impuso la obligatoriedad del velo en 1983, prenda que declaró como "la bandera de la revolución" y sin la cual las mujeres estaban "desnudas".

Lejos de eliminar su obligatoriedad, el Gobierno iraní plantea bloquear las cuentas bancarias de las mujeres que no cumplan con la nueva normativa en la que trabajan las autoridades. "Es posible notificar a las personas que no usan el hiyab a través de mensajes de texto y urgirles a que respeten las leyes", explicaba el diputado del Parlamento nacional Hosein Yalalí.

Este primer aviso se consideraría la "etapa de la advertencia", que en caso de no cumplirse daría lugar a posibles castigos. "Es posible que la cuenta bancaria de la persona sin velo sea bloqueada", indicó Yalalí. Pese a las demandas de los manifestantes, el también clérigo advierte de que "elevaremos el castigo del mal hiyab".

En el marco de las protestas, la Justicia iraní ha anunciado este martes cinco nuevas condenas a muerte contra personas acusadas de participar en las manifestaciones. Los detenidos, quienes no han sido identificados, han sido condenados a la horca por el asesinato a puñaladas de un basiji (miliciano islámico). 

Según las autoridades, otros 11 manifestantes participaron del asesinato, entre ellos tres menores de edad, que han sido condenados a "largas penas de prisión". Los 16 condenados estaban acusados de "corrupción en la tierra", que engloba una serie de delitos contra la seguridad pública y la moral islámica.

En total, 11 manifestantes han sido condenados a muerte desde el inicio de las protestas. Más de 2.000 personas han sido condenadas por diversos delitos a causa de las manifestaciones. De los cuales, otros 28 se enfrentan a posibles condenas a muerte, según ha detallado Amnistía Internacional.

El jefe del Poder Judicial, Gholamhosein Mohseni Ejei, afirmaba este lunes que se ejecutará "pronto" a "algunos" de los condenados a muerte. 

Acusan a EEUU de intentar controlar el petróleo

El ministro iraní de Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, ha rechazado las protestas y ha acusado a EEUU de incitarlas para controlar el petróleo de su país. "Los estadounidenses quieren el petróleo, la energía de Irán, y por eso han lanzado la campaña. Lo que se habla en los medios no se corresponde con la verdad", ha declarado. 

Amir Adbollahian ha negado que ningún manifestante haya muerto durante las protestas, contradiciendo las acusaciones de las organizaciones de defensa de los derechos humanos, y ha señalado que 67 policías fueron asesinados en los disturbios, de los que acusó a "extremistas procedentes de EEUU" de llevarlos a cabo.

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