Vivimos en la época de la decadencia de los reality shows, aunque la verdad, no sé si hubo algún tiempo en que los reality no fuera decadentes. Aún recuerdo la felicidad colectiva durante las primeras temporadas de Gran Hermano u Operación Triunfo, si molaban es porque eran la novedad, siempre lamentables, pero la novedad. Diez años después del primer episodio de GH, nuestra televisión ha multiplicado por mil la mierda emitida, y no estoy diciendo nada que no sepamos, pero me interesara aquí el nuevo y nocivo programa de Tele 5, I love Escassi, donde la mujer aparece reducida a lo peor, a lo más vergonzoso, a la triste figura de putón saca-cuartos. Que no es para tanto, dicen, que Tele 5 es así y ya no se puede hacer nada. Que lo único que quieren los productores es ver a un par de feministas exaltadas que sólo ayudarán a darle más bombo al asunto...

Los que pronto van a necesitar crear un reality son los miembros de la Casa Real (The Real Reality of Juanca King), quienes, según las encuestas CIS, tienen una valoración cada vez peor entre los jóvenes. Pero es que claro, nosotros qué vamos a saber. Nosotros no vivimos la Transición. Nosotros no hemos conocido a míster Juan Carlos como el señor más bueno de la película, sino más bien como un estorbo saca-cuartos y bocazas, cuyo clan siempre destaca entre los grandes éxitos de las revistas del corazón más conservadoras. Un rey que sólo aspirará a ser amado por los votantes de ese complicado Escassi Republicano Show que al conjunto de jóvenes españoles tan poco nos interesa visionar.