Este artículo se publicó hace 3 años.
El Gobierno acuerda la libre autodeterminación en la 'ley trans' que se aprobará durante el Orgullo
Fuentes de Moncloa han aclarado que se continúa trabajando "con rapidez" en el texto para que "tenga la seguridad jurídica que requiere" y no choque con la legislación existente y han añadido que se ha escuchado a los colectivos para su elaboración.
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Tras meses de estar encallada, el Gobierno ultima el anteproyecto de ley para la igualdad efectiva de las personas trans y la igualdad LGTBI, un texto que prevé aprobar el Consejo de Ministros el 29 de junio y que permitirá, entre otras cosas, el cambio de sexo y nombre en el Registro Civil sin necesidad de testigos, pruebas ni informes médicos en un plazo de tres meses.
En las últimas semanas se habían intensificado los contactos y negociaciones entre diversos departamentos y ministerio implicados, como el de Igualdad, Justicia y la Vicepresidencia Primera del Gobierno, que había mostrado su oposición a aprobar un texto en el que no se incluyeran elementos para garantizar la seguridad jurídica de un cambio de sexo registral que no requiriera ningún otro requisito más que la voluntad de la propia persona. Tal como afirman fuentes gubernamentales a la agencia Efe, el texto aún no se ha cerrado y puede sufrir modificaciones, pero existe acuerdo sobre el cambio registral del sexo, principal escollo en la elaboración de la norma.
Fuentes de Moncloa han aclarado a Público que se continúa trabajando "con rapidez" en el texto para que "tenga la seguridad jurídica que requiere" y no choque con la legislación existente y han añadido que se ha escuchado a los colectivos para su elaboración.
Con la futura ley no se necesitarán informes médicos, ni testigos, ni pruebas para que una persona trans modifique la mención del sexo y su nombre a partir de los 14 años, como ha adelantado El Periódico.
La idea del Gobierno es que la nueva ley acabe con la patologización de las personas trans y que se reconozca su identidad sentida a traves de un procedimiento administrativo sencillo en el Registro Civil: la persona interesada debe acudir al Registro con una cita previa y rellenar un formulario en el que indique que no está conforme con el sexo que le fue asignado al nacer y solicite que se proceda a su rectificación, así como el cambio de nombre.
El funcionario del Registro le informará de las consecuencias jurídicas de esa rectificación y le ofrecerá información sobre recursos de apoyo y asociaciones de protección de derechos a las que puede acudir si lo desea.
En un plazo de tres meses, la persona trans volverá a ser citada por el Registro para ratificar su decisión, momento a partir del cual el cambio de nombre y sexo será efectivo.
En el último borrador del anteproyecto, al que ha tenido acceso Efe, se fija en los 14 años la edad a partir de la cual un menor puede cambiar su sexo y su nombre en el Registro Civil. Los colectivos LGTBI pedían que se situara en los 12 años.
Una sola ley
La idea del Gobierno es aprobar una sola ley sobre los derechos de las personas LGTB y Trans. En febrero pasado el Ministerio de Igualdad presentó dos normas distintas. Pero tras varios parones por parte de la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, a los textos, tanto Igualdad como los colectivos de defensa de los derechos LGTB propusieron refundir los artículos en una sola ley que desde hace semanas se negocia de forma apresurada para llegar a la celebración del Orgullo con un texto aprobado por en el Consejo de Ministros.
Uno de los puntos irrenunciables para las organizaciones LGTB, que la ley contemple la autodeterminación de género, ha sido duramente contestado por una parte del feminismo, que ve en esta medida una forma de "borrar" a las mujeres y diluir la legislación que se había conseguido en las últimas décadas para la igualdad entre hombres y mujeres. "Aprobar leyes que permiten que cualquier varón pueda "autodeterminarse" mujer con su palabra como único trámite necesario pone en peligro los derechos de las mujeres y las niñas basados en su sexo. Nosotras, como feministas, no podemos permitir que el género se introduzca en las leyes como una identidad"y se proteja por encima de la categoría sexo", afirman desde la plataforma Contra el Borrado de Mujeres.
La titular de Igualdad, Irene Montero, se comprometió en mayo en el Congreso de los Diputados a legislar la autodeterminación del género por ley y aseguró que era una "tarea ineludible" llegar al Orgullo de 2021 con ese texto aprobado.
La aprobación del texto en el Consejo de Ministros es uno de los requisitos para que esta norma pueda ir al Parlamento. Allí le espera un largo trámite, en el que el texto puede sufrir modificaciones de calado.
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