El Juzgado Militar Central de Madrid se encargará de investigar el caso de los dos militares fallecidos durante una maniobra el pasado diciembre en el municipio Cerro Muriano, Córdoba, después de que el órgano judicial de Sevilla lo solicitase. 

El Juzgado Togado Militar 21 de Sevilla ha inhibido el caso ante la posibilidad de investigar a cuatro nuevos mandos superiores, que son competencia del Juzgado Militar Central, según pedía la fiscalía militar. Los nuevos implicados son dos coroneles, un teniente coronel y un comandante. 

En primera instancia el caso recayó en un juzgado civil ordinario, que derivó en el órgano militar de Sevilla. Este asumió la causa e imputó a tres mandos de la base: un capitán (encargado de las maniobras), un teniente y un sargento, como presuntos responsables de un delito contra la eficacia del servicio. 

Las diligencias señalan ahora a cuatro nuevos mandos implicados en el suceso. El juez considera que podrían haber incurrido en una "infracción del deber garante" correspondiente a las funciones de supervisión, autorización y ejecución de las maniobras que les costaron la vida a los dos militares fallecidos. 

Además, el titular del Juzgado de Sevilla entiende que se puede tratar de "un delito de comisión por omisión" o de un "delito contra los deberes del mando". 

Luis Romero, abogado penalista de la familia de uno de los fallecidos, ha mostrados su conformidad y "agradecimiento" por la inhibición del caso al órgano central. Los nuevos mandos implicados "deben declarar como investigados", ha comunicado. 

Los dos militares fallecieron ahogados cuando llevaron a cabo un ejercicio en un espacio acuático de la base de Cerro Muriano, en una especie de pantano artificial.

El juez instructor ha emitido que no se hizo apreciación alguna de "aspectos muy importantes para realizar el ejercicio de forma segura y correcta". A su vez, no hubo supervisión alguna, según ha dictaminado.