Las investigaciones por los contratos del Ayuntamiento de Madrid para el suministro de mascarillas, test y guantes durante la primera ola de la pandemia sacan ahora a la luz un correo electrónico enviado por el empresario Alberto Luceño a su socio Luis Medina tras cerrar el acuerdo con el Consistorio madrileño. "Pa la saca", ese es el mensaje que incorpora el sumario judicial y recoge Europa Press.

El juez Adolfo Carretero es el encargado de la instrucción de este caso en el que están en el punto de mira delitos de estafa agravada, falsedad documental y blanqueo de capitales. El correo electrónico tiene fecha del 30 de marzo de 2020 a las 19.19 horas y está escrito seis días después de cerrar el contrato de material sanitario con el Ayuntamiento capitaneado por José Luis Martínez-Almeida. Entonces, España se encontraba en el peor momento de la pandemia, cuando se registraban cientos de muertos y miles de contagios diarios.

Tanto Alberto Luceño como el comisionista Luis Medina deberán declarar el próximo 25 de abril por un asunto del que recientemente se ha conocido que el Consistorio de la capital envió 50.000 mascarillas al hospital de la mujer de Luceño como donación por uno de los pedidos. Además, otra noticia ha saltado estos días: que Medina tan solo tiene 247,26 euros en sus cuentas bancarias. Sin embargo, el empresario tiene otra fuente de riqueza, la herencia de la duquesa de Medinaceli.

La querella que está siendo investigada por el magistrado señala que Alberto Luceño y Luis Medina están "actuando de común acuerdo y con ánimo de obtener un exagerado e injustificado beneficio económico, ofrecieron al Ayuntamiento de Madrid la posibilidad de adquirir grandes remesas de material sanitario fabricado en China".

Además, apunta que las operaciones costaron al Consistorio unos 10,8 millones de euros, obteniendo "un millón de mascarillas que, a pesar de ser de buena calidad, el vendedor habría estado dispuesto a vender por un precio muy inferior al pagado; concretamente, el 40% de lo que el Ayuntamiento pagó por ellas".

También, asegura el juez, recibió dos millones y medio de pares de guantes de nitrilo, de calidad "muy inferior y características distintas a las que se le habían ofrecido, y por los que este pagó aproximadamente el cuádruple del precio que tenían ese tipo de guantes en un supermercado de Madrid en esas mismas fechas".

Asimismo, recibió 250.000 test covid-19, de los que casi una cuarta parte (60.000) eran inservibles por su reducido nivel de sensibilidad (66,7%), y otra parte importante (115.000) eran, cuando menos, también de dudosa eficacia por su bajo nivel de sensibilidad (80%). "Como contrapartida, Alberto Luceño recibió en concepto de comisiones un total de 5.100.000 dólares -4,6 millones de euros-, mediante transferencias remitidas desde Malasia a una cuenta personal", recoge.