Poco más de un año ha estado Toni Cantó en el puesto que Díaz Ayuso creó para él en la Comunidad de Madrid. El exdiputado de UPyD, Ciudadanos y ex aspirante a serlo del PP ha anunciado este jueves que deja la dirección de la Oficina del Español para "iniciar en breve un nuevo proyecto profesional". Cantó comunicó su decisión pasadas las ocho de la tarde, a través de su cuenta de Twitter, aprovechando la efervescencia informativa que ha provocado la muerte de la reina Isabel II de Inglaterra. 

"Ha sido una experiencia inolvidable que recordaré con orgullo", asegura Cantó a pesar de que su paso por la Oficina del Español ha estado sembrado de polémicas y dudas sobre sus funciones desde junio e 2021, cuando la presidenta madrileña le nombró director de un órgano de nueva creación que la oposición calificó de "chiringuito ad hoc". 

Cantó recaló en el PP de Madrid para presentarse en las listas de las elecciones autonómicas de mayo de 2021 como apuesta directa de Génova, que impuso su nombre a Ayuso en el puesto número cinco. La maniobra de la dirección de Casado no solo erosionó la relación con la presidenta madrileña, sino que salió mal: Cantó no estaba empadronado en la región en el momento de formalizar su candidatura y un juez acabo excluyéndole de la lista electoral. 

Ayuso dijo entonces que contaría con él de alguna otra manera y en los últimos días de junio anunció el nacimiento de la la Oficina del Español, un departamento de nueva creación dependiente de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, que dirigiría Cantó. Un cargo por el que cobraría, como mínimo, 75.085 euros brutos al año. El nombramiento fue muy cuestionado incluso entre las filas populares.

Cantó y Ayuso se defendieron entonces criticando la "virulencia la izquierda". "Veo a la izquierda de los 23 ministerios, de las embajadas independentistas, los precios de la luz históricos o el Falcon, escandalizarse por una oficina en fomento de la industria y el potencial económico y cultural del Español", dijo Ayuso.

El organismo se dedicaría a "la promoción de la Comunidad de Madrid como capital europea del español, interlocución con instituciones para impulsar las oportunidades económicas del español y la colaboración activa con entidades". Pero en los pocos más de doce meses que ha aguantado en el cargo, a Cantó se le han conocido más polémicas que tareas.