La evolución del agujero de ozono sobre el Polo Sur es similar a la de 2020, cuando fue catalogado como uno de los más grandes y profundos de los últimos años. Actualmente, tiene una extensión de 23 millones de kilómetros cuadrados, mayor que la de la Antártida. 

Estos datos, que han sido recopilados por el Servicio de Vigilancia de la Atmósfera del programa Copérnico (CAMS), los ha facilitado la Agencia Espacial Europea (ESA) con motivo del Día Internacional de Protección de la Capa de Ozono. 

Este 2021, la evolución del agujero de ozono "parece ser similar a la del año pasado" y, según los últimos datos, "ha crecido considerablemente" en las últimas dos semanas, por lo que ahora es mayor que el 75 % de los agujeros en esa fase de la temporada desde 1979. 

Esta evolución "es la que cabría esperar dadas las condiciones atmosféricas actuales", de acuerdo a Antje Inness, del Centro Europeo de Predicción Meteorológica a Medio Plazo (ECMWF), que ha añadido que la evolución del agujero de ozono en las próximas semanas "será muy interesante". 

El director de la misión  Copérnico Sentinel-5P de la ESA, Claus Zehner, ha explicado que este seguimiento del agujero de ozono sobre el Polo Sur "debe interpretarse con cuidado", pues la duración, el tamaño y las concentraciones de ozono de un mismo agujero están influidas por la meteorología o los vientos locales. En cualquier caso, "esperamos que el agujero de ozono sobre el Polo Sur se cierre para el año 2025", ha apuntado el experto. 

El agujero de ozono sobre el Polo Sur aumenta de tamaño entre agosto y octubre, para alcanzar su máximo entre mediados de septiembre y mediados de octubre.