El presunto padre biológico de la joven que denunció ser intercambiada al nacer con otra bebé en el Hospital de Logroño, en 2002, descarta, según ha afirmado su abogada, Alicia Redondo, acudir a la vía penal.

De acuerdo a las afirmaciones de Redondo, que también representa a la niña intercambiada que se ha criado con esta familia , en la que la madre falleció unos meses antes de que su esposo conociera esta situación, a principios de 2019, el hombre se encuentra a la espera de conocer los resultados de la prueba de ADN a la que se sometió en noviembre de 2020. Una vez los conozca, podría estudiar otras posibles acciones legales.

Se trata de un daño continuado que "no se puede cuantificar en una cifra", ha apuntado Redondo, que, además, ha explicado que han descartado la vía penal puesto que la consejera de Salud de La Rioja, Sara Alba, ya ha admitido que fue un error humano, sin que se pueda determinar quién lo hizo, y "no creemos que tenga sentido seguir por esa vía".

La investigación comenzó por una demanda de alimentos

El diario La Rioja avanzó, el pasado día 7, que dos niñas nacieron en 2002, con cinco horas de diferencia, en el Hospital San Millán, que ya no existe. Ambas necesitaron incubadora y, después, cada una de ellas fue entregada a los padres de la otra. 

En 2017, la abuela de una de las niñas, que la tenía en acogida y en funciones de tutela, interpuso una demanda de alimentos contra el padre de su nieta, a la que éste se opuso al decir que no era su hija, por lo que el Juzgado pidió unas pruebas de ADN, que constaron que este hombre no era su progenitor biológico. 

Además, también se determinó que lo mismo ocurría con su madre, por lo que solicitó saber quién eran sus padres biológicos, dando origen a una investigación, que está pendiente de saber el resultado de la prueba de ADN realizada al padre de la otra joven. 

"Máximo respeto y privacidad para las dos familias"

Alicia Redondo ha explicado que su cliente sufrió un shock cuando supo la noticia y, después de dos años, "todavía está en una situación complicada porque hay un trasfondo físico y mental detrás", puesto que todavía desconoce los resultados de la prueba de ADN, algo que, a su juicio, "no se debería haber demorado tanto". 

Según la abogada, su cliente "quiere el máximo respeto y privacidad para las dos familias", puesto que "hablamos de dos jovencitas de 19 años, con todo lo que conlleva, y por eso es importante que se respete la privacidad". Además, ha asegurado que "ningún resultado del ADN va a descolocar" a su cliente en lo que se refiere a la relación que pueda tener en el futuro con la joven a la que ha criado como una hija biológica y con la otra, en el supuesto de que se determine que lo es. 

Finalmente, ha señalado que su cliente "no está interesado en realizar ninguna declaración a los medios de comunicación por el momento", aunque ha incidido en que "pide el máximo respeto para ambas familias, que están viviendo un auténtico calvario".

Este hombre, en declaraciones que publica este jueves La Rioja, se pregunta "¿qué adelanto al saber quién hizo el cambio? ¿Vamos a arreglar los 20 años?" y afirma que "es algo que no se va a poder asumir en la vida. La herida se puede curar, pero la cicatriz queda ahí". 

Por otra parte, la joven que ha iniciado el proceso para conocer la identidad de sus padres biológicos ha pedido a la administración sanitaria riojana más de tres millones de euros por "una responsabilidad patrimonial por daños morales", según dijo, el pasado día 7, su abogado, José Sáez Morga.