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El Primavera Sound bate records con 200.000 asistentes

El festival urbano de Barcelona culmina este domingo con Primavera a la Ciutat, con las actuaciones de Mudhoney o Black Lips, entre otros

La cantautora inglesa, Polly Jean Harvey, durante su actuación en el Primavera Sound Festival que se celebra en el Forum de Barcelona. EFE / Marta Pérez.

EFE

BARCELONA.- El festival Primavera Sound ha batido este año su propio récord de espectadores, con algo más de 200.000 asistentes a los 349 conciertos que se han celebrado en el recinto principal Fórum de Barcelona y en los escenarios repartidos por la ciudad, tanto en la calle como en los bares y clubes.

El codirector del Primavera, Pablo Soler, ha precisado que todavía falta por contabilizar la cantidad de público que acudirá este domingo a Primavera a la Ciutat con los conciertos del CCCB y las actuaciones de Mudhoney o Black Lips, entre otros.

Las tres jornadas celebradas en el Fórum, que este domingo cierra sus puertas, han atraído 55.000 personas cada día; el concierto gratuito del pasado miércoles reunió a 21.000 espectadores; y las actividades en la ciudad se han encargado de redondear la cifra.
De hecho, buena parte de los abonos se vendieron antes de que se diera a conocer el cartel, un fenómeno que el codirector del festival, Alberto Guijarro, atribuye a "la fidelidad del público".

Un público mayoritariamente extranjero -52% del total- que ha asistido a un festival con bandas principalmente anglosajonas, aunque "cada año crece la presencia de formaciones españolas y de otros países", según Guijarro.

Con 187.000 metros cuadrados en el Fórum, mil periodistas acreditados y casi 12 millones de euros de presupuesto, las cifras que maneja este festival son gigantescas y crecen año tras año.

La elegancia del rock de PJ Harvey

Esta noche del sábado, miles de personas esperaban a PJ Harvey cuando se ha iluminado el escenario. En vez de la inglesa, ha entrado una banda al son de la percusión. Todos los ojos buscaban a Polly Jean Harvey cuando ha salido de detrás de una fila tocando el saxo.

Un primer golpe de efecto para acto seguido seducir al público con la elegancia de su rock.
"Chain of Keys" ha sido la canción escogida para arrancar este esperado concierto, que llega apenas dos meses después del estreno del último trabajo de la inglesa, "The Hope Six Demolition Project".

De hecho, la de Dorset ha dedicado la mayor parte de la actuación a presentar sus nuevos temas, en los que una vez más alterna golpes eléctricos con dulzura y momentos de calma.

La actuación se ha desenvuelto con una sonoridad excepcional que ha permitido a los asistentes apreciar los matices de la voz de PJ Harvey, que ha puesto en valor el dominio del escenario que dan veinte años de carrera.

Dos décadas a las que ha hecho un guiño con temas como "50th Queenie" o "To bring you my love", que han hecho las delicias de los más veteranos.

Entre las canciones que esta dama del rock ha presentado al público del Primavera Sound destacan "The Wheel", el primer single del nuevo trabajo; "Ministry of Defence" y "Community of Hope", entre otros.

Letras que una vez más hablan sobre la vida, la guerra y la muerte, así como de otras cuestiones y problemas sociales de índole más cotidiano.

Tras PJ Harvey, la elegancia ha seguido reinando en la madrugada con Sigur Rós, que han teñidos de luces y proyecciones hipnóticas el escenario, para acompañar sus melodías oníricas.

Música para cerrar los ojos y, en el caso de quienes tiene melena, dejar caer el cabello sobre la cara y mover la cabeza en busca de un vuelo introspectivo que, sorprendentemente, es perfectamente posible en un concierto tan multitudinario como el que han ofrecido hoy los islandeses.

Un fin de fiesta tranquilo para los espectadores con abono, que llevan tres días de jornadas maratonianas, y un momento de paz para lo que han decido seguir en busca de más y se han dirigido al resto de los escenarios del Fórum, que cerrará sus puertas a las seis de la mañana y dirá adiós a sus fieles seguidores hasta el año que viene.

Asistente a la última jornada del festival Primavera Sound, que cierra las puertas de Parc del Fòrum de Barcelona con cifras récord de asistencia. EFE/Marta Pérez

Los Chichos, en 'prime time'

En las antípodas, el público más moderno del Primavera descubrió su alma cañí con Los Chichos. Actuaron en "en prime time", como dijo uno de ellos con orgullo, en un espectáculo donde repasaron sus temas de siempre y que desbordó las dimensiones del escenario secundario que les han reservado los organizadores.

Al llegar la noche, las masas que iban de escenario en escenario en este festival barcelonés se dirigieron unánimemente a ver a Los Chichos, para sorpresa de los que creen que elPrimavera es un festival 'indie', apto sólo para 'hipsters'.

El gran perjudicado por este éxito fue el rapero Terrence Thornton, conocido como Pusha T, que empezó a tocar poco después, justo al lado, y veía como los espectadores que querían ver a Los Chichos se quedaban en su zona porque no podían llegar, pero miraban hacia otro lado.

Luego, muchos abandonaron el concierto de Los Chichos para ir a ver el otro gran reclamo de la noche, la musa del rock alternativo PJ Harvey, y volvieron a pasar por delante del rapero.

En las primeras filas estaban los "chicheros" de verdad, que bailaban con conocimiento de causa los éxitos de estos veteranos, que este año celebran 41 primaveras de canciones sobre droga, amor y calle.

"El Vaquilla", "Quiero ser libre" y "Son ilusiones" fueron los temas más celebrados por los asistentes a este concierto desconcertante, que finalizó con "Ni más ni menos".

Puesta de sol con Brian Wilson

El músico estadounidense Brian Wilson en su actuación de la última jornada del festival Primavera Sound. EFE/Marta Pérez

Brian Wilson, el compositor de Beach Boys, puso la banda sonora a la puesta de sol con los temas de su legendario disco "Pet Sounds". Un disco maravilloso, repleto de temas inolvidables, como "Sloop John B" o "Goods only nows", que perduran en el tiempo convertidas en clásicos imperecederos.

Lamentablemente los humanos envejecen mas rápido que muchas canciones y Brian Wilson, a sus 73 años, está bastante mayor y le falta fuerza sobre el escenario.

Sentado frente al piano, el maestro ha repasado los temas de aquel disco que cambio la historia del pop, mientras el público demostraba saberse las canciones, a pesar de que la mayoría no había nacido cuando Wilson las compuso.

Las melodías oníricas de Sigur Rós, la electrónica del proyecto Moderat y la presentación del último disco de Manel fueron otras de las citas destacadas de la última jornada en el Fórum del Primavera Sound.

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