La incidencia sigue en descenso con 114 casos menos y se notifican 382 muertes

Los datos aportados este martes por las comunidades autónomas al ministerio de Sanidad de la evolución de la pandemia por covid-19 ofrecen dos cifras contrapuestas. La cal y la arena de esta sexta ola, sacudida por la irrupción en el mes de diciembre de la variante ómicron. 

El dato positivo es que la incidencia acumulada a 14 días a nivel nacional vuelve a experimentar una nueva bajada y se sitúa en 3.267,21 casos por cada 100.000 habitantes tras descender en 113,95 casos con respecto a los 3.381,16 que se registraron este lunes. Eso supone que la incidencia ha bajado en un solo día el triple, ya que ayer se registró una bajada de 37 puntos, un dato que sumaba los casos del fin de semana.

Sin embargo, este martes hay que lamentar hasta 382 fallecimientos, una cifra tan alta que no se veía desde hacía diez meses. Pero la cifra es engañosa porque Sanidad ha explicado que se debe a un retraso en la notificación de fallecidos de una comunidad autónoma que ha subido a la estadística 154 casos que se corresponden a la suma de varios días y no a los de las últimas 24 horas. Así, el total de muertes se eleva hasta los 92.376 en toda la pandemia en España. Solo en esta sexta ola ya son más de 4.000 los fallecidos.

El Ministerio de Sanidad ha registrado 114.877 nuevos casos de coronavirus, de los que 61.669 han sido diagnosticados en las últimas 24 horas, frente a los 27.248 registrados el lunes, lo que eleva a 9.395.767 la cifra total de personas contagiadas de covid-19 desde el inicio de la pandemia.

Actualmente hay 19.314 pacientes ingresados por covid-19 en toda España y 2.204 en una UCI, si bien en las últimas 24 horas se han producido 2.181 ingresos y 2.569 altas. La tasa de ocupación de camas ocupadas por coronavirus se sitúa en el 15,47% y en las UCI en el 23,28%. Estas cifras, que son un termómetro para medir el nivel de saturación hospitalaria, están siendo estables durante esta sexta ola en torno a ese 23%.

La Comisión de Salud Pública ha cambiado este martes de criterio en la estrategia de vacunación y ahora recomienda a los adultos vacunados que se hayan infectado de coronavirus esperar cinco meses desde que superan la covid para ponerse la tercera dosis, mientras que a los niños que aún no hayan recibido ningún pinchazo se les administrará una única inyección a las ocho semanas del contagio y no cuatro.