Este artículo se publicó hace 2 años.
El caso Rubiales: así se han polarizado las redes sociales
Mientras que en Youtube ha proliferado la publicación de vídeos favorables a Luis Rubiales, la sociedad y Twitter mostraban su firme apoyo hacia Jennifer Hermoso tras el beso no consentido en la celebración del Mundial.
Helena Celma
Este pasado domingo, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, presentó su dimisión al cargo, justo tres semanas después de que el gol de Olga Carmona sirviera para coronar a la selección femenina como campeona del Mundo en Sydney. En circunstancias normales, esta hazaña hubiera sido el centro de atención durante días, pero el beso que el máximo mandatario propinó a la futbolista Jenni Hermoso en la entrega de medallas se llevó todo el protagonismo, desafortunadamente.
Para anunciar su dimisión, Rubiales no hizo una rueda de prensa o un comunicado al uso, sino que optó por una entrevista con Piers Morgan, un periodista inglés conocido por sus machistadas y por ser muy crítico con varias figuras femeninas como Meghan Markle, entre muchas otras.
Este paso al lado podría haberlo dado en la asamblea extraordinaria que organizó frente a todos los miembros de la Federación el pasado 25 de agosto, pero en vez de reconocer el error y dejar el trono, prefirió huir hacia adelante y gritar cuatro veces "no voy a dimitir" a pleno pulmón, además de hacerse pasar por la víctima de un linchamiento mediático y político y culpar al "falso feminismo" de ello.
Quizá lo peor no fue su discurso bochornoso, sino los aplausos que recibió al terminarlo. Por mucho que en los días posteriores hubieran dimisiones y cartas de repulsa hacia su actitud, como fueron el caso de los seleccionadores Jorge Vilda y Luis de la Fuente, la realidad es que en ese momento se vio envuelto por su manada, tal y como define Lucía Lijtmaer en su artículo de El País.
Las redes sociales, testigo del escándalo
En la antigua Grecia, el ágora era el centro de la vida social, política y comercial de la ciudad. Era la zona en la que todos los ciudadanos se congregaban para discutir ideas y debatir sobre lo que iba pasando. En la actualidad, lo más parecido a esto son las redes sociales. Esta ventana social permite que usuarios de todo el mundo interactúen entre ellos, y cuando hay algún tema de mucho interés social, el ‘ágora virtual’ se llena a más no poder. Esto es lo que ha pasado precisamente con el caso Rubiales.
Desde el momento en el que tuvo lugar el desafortunado episodio, las redes sociales dejaron claro que no era algo que fueran a pasar por alto. De hecho, periodistas especializadas en el fútbol femenino como Danae Boronat ya decían que “no se puede permitir que el deporte esté en manos de personas que NO respetan a las mujeres tal y como ha podido ver hoy el mundo entero”.
Tras el discurso de Rubiales en la asamblea, las futbolistas dijeron basta y se unieron en el movimiento "Se acabó", iniciado por Alexia Putellas, la ganadora de dos Balones de Oro consecutivos y uno de los mayores exponentes del fútbol femenino en todo el mundo.
A pesar de que la tendencia en Twitter ha pasado a ser "No voy a dimitir" en referencia a la famosa frase, la realidad es que todo el movimiento empezó con un #SeAcabó que ahora ha iluminado el camino de salida del ya expresidente de la Federación.
A este movimiento se sumaron políticas de renombre como Irene Montero, la ministra de Igualdad en funciones, y Yolanda Díaz, la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones, tanto en el inicio de la polémica como en el final de ella.
Pero las redes sociales no se limitan tan solo a Twitter, sino que también está Youtube. El usuario @SoyMmadrigal ha realizado un análisis sobre la evolución de éste, desde el momento en el que se trató el beso como noticia hasta el punto en el que se ha convertido en una batalla campal entre los dos posicionamientos.
Los medios de comunicación que lanzaron las primeras imágenes del suceso fueron El País, por parte de España, y The Guardian y ITV News, por parte de los extranjeros.
Muchos usuarios han criticado la cobertura informativa, principalmente a raíz de la portada que el diario deportivo As dedicó a la futbolista en vísperas de la reunión extraordinaria de la Real Federación Española de Fútbol. El titular Jenni deja caer a Rubiales responsabilizaba a Hermoso del futuro del entonces presidente de la RFEF y, además, se permitió la familiaridad de referirse a la jugadora únicamente por su nombre de pila abreviado, Jenni, y reservó para él un trato formal, nombrándolo por su apellido.
Pero el sesgo no se limitó al ámbito informativo. La marea tóxica se vuelve incontrolable cuando filtramos los vídeos por la categoría de entretenimiento. En este apartado, youtubers como Un Tío Blanco Hetero (UTBH) e InfoVlogger, conocidos por su contenido antifeminista, dedicaron vídeos extensos donde se hacía énfasis en reforzar su postura contraria a Jenni Hermoso, la víctima del beso no consentido.
¿Youtube VS. Twitter?
Mientras que en Youtube ha ido aumentando progresivamente el contenido más favorable a Luis Rubiales, en las redes sociales y en la sociedad se daba el fenómeno contrario. Cada nueva noticia que se iba sucediendo servía como alimento para que miles de usuarios en Twitter despotricaran contra el presidente de la Federación y, de paso, el entrenador de la selección femenina Jorge Vilda, quien también ha sido el blanco de numerosas críticas.
Cada nuevo paso desde la Federación era más inverosímil que el anterior. La incredulidad se iba abriendo camino ante los usuarios tras la esperpéntica comparecencia de Rubiales. Por no mencionar las declaraciones del futbolista del Real Madrid, Dani Carvajal, hablaba desde la concentración de la selección española y ponía en duda que realmente Jenni Hermoso fuera una víctima. Lo triste de estas palabras fue que vinieron tras un comunicado conjunto de toda la selección masculina, donde condenaban las actitudes de Rubiales pero pedían que se pasara página ya para concentrarse en el siguiente partido. El texto no convenció demasiado, ya que dio la impresión de llegar tarde y mal.
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Otros futbolistas que sí que se mojaron fueron Borja Iglesias, Héctor Bellerín o Isco, todos futbolistas del Betis. Los tres hicieron referencia a la falta de consentimiento en ese beso y afirmaban que era "abuso de poder". Además, el primero fue un paso más allá y afirmó que no volvería a la Selección si no habían cambios en la Federación. A ellos se les unieron Andrés Iniesta e Iker Casillas, dos de los jugadores con los que la selección española masculina de fútbol ganó el Mundial de 2010.
Una gran multitud de personas criticaron las palabras de Carvajal por Twitter, mientras que en Youtube ocurría lo contrario, como en el siguiente vídeo.
Hubo personas del mundo del fútbol que se dieron cuenta del trasfondo del problema. "Hemos normalizado ciertas cosas que luego es un caldo de cultivo que nos lleva a ese machismo que subyace por ahí", declaraba Eder Sarabia, entrenador del FC Andorra en una rueda de prensa.
Las redes como medio para reforzar la postura
Los vídeos filtrados de la futbolista riendo en el autocar de vuelta son el ejemplo perfecto de cómo se han polarizado las redes sociales. Para aquellos que ya negaban que Jenni Hermoso fuese víctima de una agresión sexual, estas nuevas imágenes eran más madera para seguir exculpando a Luis Rubiales. Sin ir más lejos, Roma Gallardo publicaba un vídeo en el que ironizaba sobre las imágenes e ironizaba sobre el hecho de que Hermoso fuese una víctima pese a salir riendo.
Comentarios como ese propiciaron que la ministra de Igualdad tuviera que recordar que nada de lo que una víctima de agresión sexual pueda hacer después de un episodio de violencia desacredita su denuncia. Este tuit no fue suficiente para frenar el despropósito y el diario ABC llegó a publicar este esperpéntico titular: "Jenni Hermoso localizada en Marbella, al lado de su familia, con un helado de turrón y chocolate blanco". Cualquier nueva imagen era susceptible de servir de "justificación" a los que se posicionaban del lado de Rubiales para reforzar su postura.
La psicóloga Claudia Nicolas explica en su canal de YouTube que las redes sociales son el lugar por excelencia de la proyección, que no es más que ver un suceso como una forma de apoyar nuestro punto de vista.
Es por ello que un solo vídeo puede representar una prueba inequívoca para las dos posturas. En esto también coincide Begona Gerpe, una youtuber que se ha mantenido fiel al bando del ya expresidente de la RFEF, que afirma que un vídeo no haría cambiar de opinión a nadie. "Las personas que han defendido a ultranza la actuación tanto de Jennifer Hermoso como del resto de feministas se iban a mantener en su postura. Y aunque estén viendo blanco, dirán negro”, apuntaba.
Pero, de la misma manera que el patriarcado se reinventa y la ideología de la machosfera se propaga por estos canales audiovisuales, el feminismo ha logrado desplegar una contracultura que ya es imparable. La dimisión de Rubiales ha demostrado que, aunque la polarización está a la orden del día, el cambio hacia la igualdad ya no tiene marcha atrás.