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Fin de semana largo por delante en Estados Unidos, con motivo de la celebración del Memorial Day. Su presidente ha aprovechado la ocasión para hacer una escapada para jugar al golf en su club de Washington. Equipado para la ocasión, pero no al completo, porque de nuevo Donald Trump ha prescindido usar mascarilla. Coincidiendo con el estreno de la temporada estival en el país, las playas han sido el destino elegido por muchos. Masificaciones en la arena y en el paseo, coincidiendo además con la reapertura de la que disfrutan ya la mayoría de los Estados. También los parques, como el de Central Park en Nueva York lleno de gente reunida en grupos, ante la atenta mirada de los agentes de seguridad que velan porque se cumpla la distancia de seguridad obligatoria. Por detrás, en el ranking de contagiados, Brasil. Al que su predecesor, Estados Unidos le complica aún más las cosas, prohibiendo a todos sus viajeros la entrada en el país. Así las cosas, Jair Bolsonaro sigue desafiando el confinamiento, porque se ha quitado la mascarilla para acercarse a los manifestantes que respaldan su postura de reabrir la economía del país. Opuesto a él uno de sus asesores ha anunciado su dimisión. Y de asesores va la cosa, con escrache incluido a las puertas de su casa por saltarse las normas. Pese a las críticas de su propio partido, Boris Johnson se posiciona a favor de su asesor principal, defiende que el viaje que realizó estaba justificado y no tenía alternativa. -Redacción-