La bolsa española bajó hoy el 0,99 por ciento y perdió el nivel de 13.600 puntos, afectada por la creciente posibilidad de un aumento de los tipos de interés en Europa, así como por la debilidad del negocio inmobiliario estadounidense y por los nuevos máximos históricos del petróleo y el euro.

El índice de referencia del mercado nacional, el Ibex-35, cayó 135,50 puntos, el 0,99 por ciento, y acabó la sesión en 13.593,40 puntos.

Por su parte, el índice general de la Bolsa de Madrid cedió el 0,84 por ciento, mientras que subieron el Ibex Medium, el 0,21 por ciento y el Ibex Small Caps, el 0,12 por ciento.

En Europa, con el euro en 1,599 dólares, Fráncfort bajó el 0,86 por ciento; París, el 0,77 por ciento; Milán, el 0,51 por ciento, y Londres, el 0,3 por ciento.

Después de la caída del 0,2 por ciento de Wall Street en la sesión anterior, del retroceso de Tokio el 1,1 por ciento esta madrugada y de las pérdidas de las plazas europeas, la bolsa española comenzó la sesión con un descenso moderado.

Perdía el mercado el nivel de 13.700 puntos, presionado por el elevado precio del petróleo Brent, que se negociaba al récord de 115 dólares por barril.

Las declaraciones del gobernador del Banco de Francia, Christian Noyer, en las que sugería que el Banco Central Europeo (BCE) podría subir los tipos para asegurar el objetivo de inflación en el 2 por ciento, lo que, unido a la subida del crudo, presionó al alza a la cotización del euro.

Mientras el mercado esperaba a la apertura de Wall Street sin perder de vista el nivel de 13.700 puntos, se iban conociendo los resultados, que superaban las previsiones de algunas compañías estadounidenses, como Texas Instruments, ATT, DuPont o Locked Martin.

A pesar de las cuentas societarias, la apertura a la baja de Wall Street hizo que el mercado nacional bajara de 13.550 puntos.

Las pérdidas del mercado neoyorquino se reforzaron con el descenso del 5 por ciento de la venta de viviendas de segunda mano en marzo en EEUU afectó a la cotización del petróleo y del euro, que avanzaron hasta los máximos históricos de 115,89 dólares y 1,6011 dólares, respectivamente.

Todos los grandes valores bajaron: Iberdrola, el 1,78 por ciento; BBVA, el 0,91 por ciento; Banco Santander, el 0,88 por ciento; Telefónica, el 0,75 por ciento, y Repsol, el 0,39 por ciento.

Iberia encabezó las pérdidas del Ibex con una caída del 4,85 por ciento, afectada por un informe negativo y a pesar de la propuesta del próximo pago de un dividendo, seguida de Sacyr, que bajó el 2,83 por ciento, mientras que Inditex perdió el 2,72 por ciento y Cintra, el 2,64 por ciento.

Sólo tres compañías del Ibex acabaron con ganancias: Grifols, que avanzó el 1,62 por ciento; Acerinox, pese a un informe negativo y en espera de conocerse sus resultados, mientras que Gamesa subió el 0,03 por ciento. Repitieron cotización Sogecable, Ferrovial y Criteria.

Aisa comandó las pérdidas del Ibex al bajar el 6,29 por ciento, en tanto que Inmobiliaria Colonial, mientras los bancos acreedores se agrupan, consiguió la mayor subida, el 10 por ciento.

La rentabilidad de la deuda española a largo plazo subía dos centésimas y se situaba en el 4,43 por ciento, mientras que en el mercado continuo se negociaron 3.656 millones de euros, de los que cerca de 650 procedieron de operaciones efectuadas entre inversores institucionales.