Valencia, 11 sep (EFE).- La lesión del portugués Marco Caneira, que el pasado sábado se produjo una rotura fibrilar en el partido que enfrentó a su selección ante la de Polonia y que le tendrá tres semanas de baja, es la quinta que afecta a un futbolista del Valencia en compromiso internacional en los últimos catorce meses.

En esta lista, además del defensa portugués, se encuentran su compatriota Miguel Brito, que ha padecido dos lesiones, y los españoles Fernando Morientes y David Albelda.

El primero de todos ellos en caer fue el luso Miguel que se rompió los ligamentos de la rodilla derecha en las semifinales del Mundial de Alemania que disputó su selección ante Francia en el mes de julio de 2006.

El portugués estuvo dos meses de baja y el técnico Quique Sánchez Flores no pudo disponer de él para tratar de superar la fase previa de la Liga de Campeones ante el Salzburgo ni el inicio de Liga frente al Betis.

Dos meses más tarde, caería el capitán del Valencia que el pasado 6 de septiembre de 2006 se fracturó el arco cigomático izquierdo -pómulo-, en la derrota de España ante Irlanda del Norte por 3-2 y tras ser intervenido quirúrgicamente, permaneció algo más de dos semanas alejado de los terrenos de juego.

La recuperación de Albelda obligó al técnico madrileño a buscarle sustituto durante tres encuentros, dos de Liga (Atlético de Madrid y Getafe) y en el estreno en Liga de Campeones ante el Olympiakos griego.

Meses después le llegó el turno al atacante Morientes que, en marzo de 2007, sufrió una luxación de hombro al golpearse contra un poste en un lance de la victoria española ante Islandia por 1-0 en Mallorca.

El delantero cacereño estuvo de baja más de quince días y no pudo participar en dos encuentros de Liga, Espanyol y Athletic, pero sobre todo, se perdió el partido de ida de los cuartos de final de Liga de Campeones ante el Chelsea y pudo jugar el de vuelta con una protección.

La de Morientes no fue la última lesión antes de acabar el curso pasado y Miguel volvió a caer con su selección ante Bélgica en partido clasificatorio para la Eurocopa 2008. En aquella ocasión el problema fue menos grave y una pequeña rotura fibrilar le privó de jugar los últimos dos partidos de Liga ante Levante y Real Sociedad.