La presencia de periodistas que hacen guardia ante el domicilio de San Sebastián de Iñaki de Juana Chaos, ha disminuido hoy notablemente con respecto a ayer, tras la puesta en libertad del ex preso de ETA.

Al mediodía de hoy una decena de informadores aguardaba en las inmediaciones del citado domicilio ante la posibilidad de que De Juana acuda a su casa, mientras que no había aparcadas en la zona más que una de las numerosas unidades móviles de televisión desplazadas ayer a la Avenida Carlos I del barrio de Amara de San Sebastián.

En un tercer piso del inmueble número 1 de dicha calle está situada la vivienda en la que podría residir De Juana, cuya titularidad consta a nombre de su mujer Irati Arantzabal, aunque en el pasado perteneció a su madre.

En la cuarta planta de este mismo inmueble reside María Teresa Embid Melero, viuda de un militar asesinado por ETA, al tiempo que en la misma calle viven familiares de otras víctimas de la organización terrorista.

Desde media mañana, varios fotógrafos, cámaras de televisión e informadores hacen guardia nuevamente hoy en esta zona de Amara, donde no hay presencia policial visible y donde los vecinos se desplazan con absoluta normalidad, más habituados, al parecer, a la presencia de medios de comunicación.

Iñaki de Juana Chaos no acudió ayer al recibimiento que los movimientos pro amnistía le habían preparado en la Parte Vieja de San Sebastián, donde se leyó una carta del ex preso, en la que indicaba que debía recuperarse de la huelga de hambre que había mantenido en los últimos días de su estancia en prisión, tomarse "con tranquilidad" junto a su familia su cambio de vida, "aterrizar poco a poco" y evitar el "circo" que, según ha dicho, se ha "montado" en torno a su caso.