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El documental sobre las "maras" que acabó con la vida de Poveda llega al cine

EFE

"La vida loca", el documental que realizó el fotógrafo y documentalista franco-español Christian Poveda sobre las pandillas juveniles ("maras") de El Salvador que finalmente acabaron con su vida, llega el próximo viernes 30 al circuito comercial español.

El productor de la película, Luis Ángel Bellaba, explicó hoy ante la prensa cómo el rodaje de este filme, que fue presentado en el Festival de San Sebastián de 2008, se convirtió "en un jardín del que Christian no pudo salir".

Durante dieciséis meses de filmación en el barrio salvadoreño de La Campanera (donde fue posteriormente tiroteado), Poveda y un técnico de sonido como únicos miembros del equipo siguieron la vida de los "dieciocheros" -miembros de la "mara 18"- y su terrible cotidianeidad, "tatuada" con ajustes de cuentas y con la violencia como principal elemento de cohesión social.

Poveda -descrito por su productor como "apasionado, obsesivo y fascinado por la violencia"- entendía a las "maras" como "víctimas del sistema", como hijos de la violencia heredada de las pandillas salvadoreñas que, durante la guerra civil de su país en los años ochenta, emigraron a Estados Unidos y posteriormente fueron repatriados.

"Pactó rodar con ellos y llegó a coger cariño a los personajes", algo que queda patente en la humanidad que respira "La vida loca". "Su sueño era que la 18 y la Salvatrucha -la otra gran 'mara' salvadoreña- hicieran un acuerdo de paz", aseguró el productor. Sin embargo, el pasado 2 de septiembre, el horror que Poveda mostraba en su película se volvió contra él.

"Christian murió como mueren los personajes en su película", aseguró Bellaba, que reconoció que, con cinco detenidos -entre ellos un policía-, todavía hay muchas versiones sobre lo que realmente ocurrió.

"Después de acabar la película, Christian volvió a España y Canal + emitió el documental. Inmediatamente, aparecieron copias pirata en El Salvador, que se vendían a 5 dólares", apuntó.

Además, al volver Christian al país centroamericano, "el poder en la 'mara' había cambiado y la gente con la que había pactado ya no estaba".

Casi dos meses después de su muerte y transcurridas cuatro semanas de su estreno en Francia, "La vida loca", con noventa minutos de imágenes descorazonadoras potenciadas por el trágico final extracinematográfico de su historia, llega a las pantallas españolas.

"Sería una película aún más difícil de estrenar si Christian no hubiera muerto, pero aun así se habría estrenado", aseveró Bellaba, quien considera que las "maras" -que también protagonizan este año la película "Sin nombre"- son un "producto muy exportable" y cada vez más cercano a países como España, donde actúan otras pandillas latinoamericanas como los "ñetas".

"Poveda ha dejado un testimonio. Ahora nos toca a todos juzgarlo para bien o para mal", concluyó Bellaba.

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