Telecinco y dos productoras de la cadena Cuarzo y Mandarina se exponen al pago de 100.000 euros de indemnización a una menor por violar su derecho a la intimidad al emitir tres apariciones suyas durante la cobertura del asesinato de Marta del Castillo, cometido en Sevilla en enero de 2009. El juicio quedó ayer visto para sentencia tras declarar ante un juez de Sevilla la menor y los representantes de los acusados. Los argumentos de la cadena no convencieron a la Fiscalía de Sevilla, que cree que la chica, que respondió incluso en una entrevista a preguntas de índole íntima con el rostro visible, vio desprotegido su derecho al honor, a la intimidad y a la propia imagen.

Las apariciones, que se realizaron con el consentimiento de su madre, tuvieron lugar en los espacios El programa de Ana Rosa, Rojo y negro y Está pasando. Según la fiscalía, las emisiones carecían de 'relevancia pública y sólo respondían a elementos espectaculares o morbosos'.

La menor, que tenía 15 años cuando acudió a los programas en febrero de 2009, había sido novia de Miguel Carcaño, autor confeso de la muerte de Marta del Castillo, que tuvo un formidable impacto mediático y abrió un intenso debate sobre los límites de la información sobre hechos delictivos cuando afectan a menores.

La primera demanda de oficio de la fiscalía incluía a otra joven, íntima amiga de Marta del Castillo, que apareció siendo menor en los mismos programas y para quien la fiscal había pedido 30.000 euros de indemnización. No obstante, durante la tramitación de la causa, la chica alcanzó la mayoría de edad y decidió renunciar a mantener la demanda.