Un suicida mató el lunes a once personas, entre ellas nueve oficiales de policía, en el sur de Afganistán, dijo el Ministerio del Interior.

El agresor se desplazaba a pie e hizo explotar los explosivos que llevaba encima junto a un grupo de oficiales que se encontraban a las puertas del principal cuartel de policía en Lashkar Gah, la capital de la provincia de Helmand, dijo un responsable policial local.

Dos civiles también perecieron, dijo el Ministerio del Interior en Kabul en un comunicado. Otras 29 personas, muchas de ellas policías, resultaron heridas.

En un atentado diferente en la provincia occidental de Farah el lunes, un hombre que iba a hacer explotar los explosivos que portaba mató a un policía que vigilaba el complejo, dijo un responsable.

"Las informaciones iniciales indican que al menos seis policías murieron y diez resultaron heridos", dijo a Reuters por teléfono el jefe policial Kamal Jan.

Un médico de un hospital en Lashkar Gah, Enayatulah Ghafari, dijo que varios civiles también murieron en el ataque y agregó que la cantidad de heridos llegaba a 25.

Afganistán ha vivido una creciente violencia desde 2008 por parte de los insurgentes talibanes, que han cobrado fuerza en los últimos años tras ser apartados del poder en 2001 por tropas encabezadas por Estados Unidos.

Desde el fin de semana pasado, nueve soldados extranjeros han muerto en una serie de incursiones de los talibanes, en la semana más mortífera de los últimos meses para las fuerzas extranjeras en el país.

Unos 70.000 soldados extranjeros al mando de la OTAN y el Ejército estadounidense, junto con decenas de miles de los afganos que forman parte de las fuerzas gubernamentales, luchan por vencer a una insurgencia que se las ha apañado para reforzar su tamaño y el alcance de sus actividades desde hace un año.