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El PNV estrena la pinza con el PP

Erkoreka acusa al Gobierno de 'instrumentalizar' la Justicia ante los comicios vascos y gallegos

GONZALO LÓPEZ ALBA

Desde que se verificó que en Euskadi es posible que vuelen los cerdos, nada es igual en el hemicirco del Congreso de los Diputados. El autor de aquella frase, portavoz del grupo que hace tres meses arrimó al PSOE el botijo decisivo para aliviar la sed de los votos con que se aprobaron los últimos Presupuestos que dan vida al Gobierno hasta fin de año, debutó ayer con solemnidad como ariete de la oposición. Lo hizo formando pinza con el PP y con tal entusiasmo que hasta abrazó alguna teoría conspirativa de los conservadores.

Saltó al coso parlamentario Josu Erkoreka como los toros que escarban el albero antes de embestir. Dejando ver sus intenciones. La arremetida fue en toda regla, dispuesto a empitonar todo lo que oliera a cuerpo de socialista.

Zapatero responde al portavoz del PNV que ni él 'se cree lo que ha dicho'

No hubo sorpresa porque, aunque sin perder su característico porte aterciopelado, el portavoz del PNV se atuvo a la consigna del apoderado de su divisa, Íñigo Urkullu, de denunciar el afeitado electoral en Euskadi.

Sin mencionar en ningún momento por innecesario que se refería a la ilegalización de las marcas herederas de Batasuna, sostuvo que previamente a los comicios se produjeron 'unas actuaciones judiciales sonoras', que 'condicionaron enormemente el desarrollo de la campaña electoral e influyeron, en algún caso, de modo decisivo en el resultado arrojado por las urnas'. De modo que: 'Sobre estas elecciones pesará siempre la sospecha de que el Gobierno intentó instrumentalizar el Poder Judicial para ponerlo al servicio de sus intereses y expectativas electorales'.

Euskadi, Galicia y Catalunya

Para Erkoreka, 'algún ingenuo ciudadano podrá pensar que fueron (aquellas decisiones judiciales) producto de la casualidad o quizá expresión genuina e ingenua del Estado de derecho', pero en lo que a él y a su partido atañe, no hay duda de que 'tras estas actuaciones se encontraba la mano calculadora e interesada del Gobierno'. Para los socialistas, los ingenuos serán quienes crean que Erkoreka diría lo que dijo si su partido no viera peligrar como peligra la presidencia del Gobierno vasco.

La sorpresa fue que, de forma inopinada, el portavoz del PNV hizo una incursión por tierras galaicas del brazo del PP. Allí vio también a la misma 'mano calculadora' meciendo la balanza de la Justicia, de modo que el PSOE 'lastró a sus principales contrincantes dificultándoles la carrera', aunque en este caso el resultado fuera 'un estrepitoso fracaso'.

Respondió Zapatero a la embestida con un mero quite: 'Ni usted mismo se cree nada de lo que ha dicho'; y un pase natural: 'Tenemos un sistema de división de poderes y de independencia del Poder Judicial que actúa en función de la aplicación de la ley'.

Con la fuerza renovada del avituallamiento gallego, quiso Soraya Sáenz de Santamaría, antes de que el presidente haya sacada el pañuelo para cambiar al tercio de espadas, saltar el callejón desde el albero hasta la barrera: 'Los gallegos han sido los primeros en decir sí al cambio'.

Por el callejón es frecuente en estos días ver a diputados socialistas haciéndole la corte a otros de CiU y tentándoles con lo que más les puede seducir: 'Yo que vosotros aprovecharía las circunstancias para hacer caja'. O sea, para reivindicarse como el viejo partido de Pujol que rentabilizaba en Catalunya su influencia en el devenir de España. Más a la vista se produce el flirteo reconciliatorio con ERC: Ridao frecuenta la reja de Alonso y por los pasillos ayer pudo verse entretenido a Tardà con Solbes.

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