La secretaria de Política Internacional del PSOE, Elena Valenciano, ha asegurado hoy que el Gobierno "no tiene absolutamente nada que ocultar" en relación con el caso de las escalas de vuelos de la CIA en España y que informará de todo lo que conoce de este asunto en favor de la "transparencia".

Valenciano, en declaraciones a EFE, ha reiterado que el Gobierno socialista no ha tenido conocimiento de ningún traslado ilegal de presos a Guantánamo desde su llegada al poder en 2004.

"Hasta donde hemos investigado nosotros, no se cometió ninguna ilegalidad. No tenemos absolutamente nada que ocultar. Hemos sido transparentes y lo seremos hasta el final. Vamos a contar todo lo que sepamos", ha afirmado Valenciano.

La portavoz de Exteriores del PSOE ha hecho referencia a la investigación abierta por el Ministerio de Asuntos Exteriores sobre un informe secreto en el que se revelaba que el Gobierno de José María Aznar autorizó a EEUU en enero de 2002 a que vuelos de la CIA transitaran por España rumbo a Guantánamo.

La conclusión de esta investigación es que el escrito confidencial, fechado el 11 de enero de 2002 y firmado por el entonces director general de Política Exterior para América del Norte, Miguel Aguirre de Cárcer, no está en los archivos del Ministerio.

Valenciano ha pedido al PP que no haga "lucha de partidos" de esta cuestión al tratarse de un caso que afecta al ámbito de la seguridad y de las relaciones de España con Estados Unidos.

El Grupo Popular ha instalado al Gobierno a decir si hubo vuelos de la CIA con prisioneros ilegales desde 2004.

En opinión de Valenciano, se trata de un caso "lo suficientemente serio y delicado", por lo que ha recomendado "rigor, responsabilidad y transparencia".

"Este asunto tiene su importancia y su gravedad. Las especulaciones pueden hacernos daño a todos", ha añadido Valenciano, quien ha recordado que el ministro de Asuntos Exteriores comparecerá el próximo miércoles en el Congreso para informar de esta cuestión.

La diputada del PSOE no ha querido responsabilizar al PP de haber autorizado escalas ilegales durante su etapa en el poder, pero ha considerado más lógico que, de haberlas habido, fueran con Aznar y no con el actual presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.