Sergio Ramos, defensa internacional del Real Madrid, opinó sobre la imagen de Angel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), con la camiseta del Real Madrid tras una cena, y afirmó que "no se debe malinterpretar una foto".

La imagen de Villar con la camiseta del Real Madrid, junto a Ramón Calderón, presidente blanco, y Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, que también mostraba una elástica blanca con su nombre, estuvo en boca de todos en la ciudad deportiva de Valdebebas. En rueda de prensa, Sergio Ramos pidió que no se malinterprete, ni se mezcle con temas arbitrales.

"Tampoco creo que sea nada malo. Igual se la podía hacer con la de cualquier club español", opinó sobre Villar. "Nunca hemos entrado en debates por los árbitros y tampoco lo vamos a hacer ahora. Hacen su trabajo y nosotros jugamos. Deben estar en un termino medio, ni a favor ni en contra. Ellos deben actuar igual, no deben malinterpretar una foto. Sería una tontería", dijo.

Aunque Ramos reconoció que en su caso nunca se pondría una camiseta del Barcelona o el Real Betis, los dos grandes rivales de los equipos de su carrera, Real Madrid y Sevilla. "No me pondría ninguna de las dos. Sólo orgulloso la de mi equipo, la del Real Madrid. Las otras las dejaría para otras personas", señaló.

El defensa justificó las declaraciones de Pedja Mijatovic, director deportivo de su club, tras la derrota ante el Getafe, cuando calificó el gol de acción antideportiva.

"Te coge en momentos calientes después de un partido en el que todos pensábamos que los tres puntos se quedarían en casa, el Barcelona se ponía a dos puntos y todos podemos ponernos nerviosos y decir cosas de las que nos arrepintamos", manifestó.

Y cerró el capítulo arbitral hablando de la mano del jugador del Barcelona Samuel Eto'o en el partido de Copa del Rey disputado ayer ante el Valencia, que no vio Iturralde González, el colegiado que pitará el próximo encuentro del Real Madrid en Liga.