El narcotraficante colombiano Diego Montoya, antiguo jefe del Cartel del Norte del Valle, pidió perdón a las víctimas de la violencia de las drogas en un tribunal de Estados Unidos que lo condenó el miércoles a 45 años de cárcel.

Montoya se declaró culpable en agosto de cargos de narcotráfico y extorsión como jefe de un cartel al que el FBI responsabilizó del 60 por ciento de la cocaína exportada de Colombia a Estados Unidos.

"Yo he reflexionado sobre estos actos y he concluido que nada que yo haga jamás repararía el gran daño que he causado", dijo Montoya en una carta que leyó su abogado ante el tribunal.

"Mi esperanza es que mi decisión de declararme culpable y aceptar mi castigo traerá algún medio de paz a las víctimas de mis actos y sus familias", agregó la misiva.

La juez de Distrito Cecilia Altonaga dictó la sentencia de 45 años, que Montoya había acordado como parte de su declaración de culpabilidad. El acuerdo de extradición prohibió a una sentencia de cadena perpetua.

Conocido en el bajo mundo del crimen como "Don Diego", Montoya se convirtió en un multimillonario que dirigió el Cartel del Norte del Valle, una organización que envió a Estados Unidos cocaína con un valor estimado en 10 millones de entre 1990 y 2004.

La organización de Montoya reemplazó al Cartel de Cali después de que fue desarticulado con la captura de sus principales líderes, incluidos los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela.

"Don Diego" sostuvo una batalla a muerte con Wilber Varela, otro líder del Cartel del Norte del Valle, que provocó cientos de víctimas entre el 2003 y el 2005, de acuerdo con la Fiscalía General de Colombia.

Montoya, de 48 años, fue incluido por FBI en una lista de los 10 más buscados del mundo junto a Osama bin Laden.

El narcotraficante fue capturado por el Ejército colombiano en el 2007 escondido en una zanja vestido sólo con ropa interior y fue extraditado a Estados Unidos en diciembre.

El colombiano se declaró culpable de un cargo de conspiración para importar más de 5 kilogramos de cocaína a Estados Unidos, un cargo de obstrucción a la justicia por asesinato y un cargo de conspiración de crimen organizado.

En abril, el hermano de Montoya, Eugenio Montoya Sánchez, fue condenado por una corte de Estados Unidos en Miami a 30 años de prisión por conspirar para importar cocaína.

Dos miembros de la familia también fueron condenados a prisión en el mismo caso.

El Gobierno de Colombia se declaró de acuerdo con la sentencia impuesta por la justicia de Estados Unidos al antiguo líder del Cartel del Norte del Valle.

"El país siempre que extradita a estos delincuentes aspira a que la justicia norteamericana les aplique una sanción severa y correspondiente. En general esas condenas son lo que la gente espera", dijo a periodistas en Bogotá el ministro del Interior y de Justicia, Fabio Valencia.