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Hallado un corrimiento gigante de tierra en Tenerife

El desprendimiento se produjo por una explosión volcánica hace 733.000 años

T. P.

El origen volcánico de las islas Canarias hace de este archipiélago un lugar de gran interés científico para muchos geólogos y vulcanólogos. A la reciente actividad que está teniendo lugar en la pequeña isla de El Hierro y que ha atraído la atención de gran parte de la comunidad científica, se une ahora el descubrimiento de los restos de un enorme deslizamiento de tierra que se produjo en la isla de Tenerife, debido a una gran explosión de origen volcánico, hace unos 733.000 años.

Los investigadores responsables de la investigación, cuyos resultados se publicarán en el próximo número de la revista Geology, aseguran que los restos encontrados son los mejor preservados que se han hallado de este tipo de deslizamientos de tierra. 'Es uno de los ejemplos mejor conservados del mundo, puesto que en este tipo de fenómenos los escombros se suelen desperdigar por el fondo oceánico, con lo que se vuelven inaccesibles', explica Mike Branney, de la Universidad de Leicester y uno de los autores del estudio.

Según los investigadores, las laderas del sureste de la isla se desprendieron durante una erupción volcánica, precipitándose hacia el mar. En este tipo de proceso, relativamente común, aunque infrecuente, la lava va empujando la roca hasta que desprende una de las laderas del volcán.

Los científicos aseguran que los desprendimientos a gran escala son un proceso clave en la evolución de las islas oceánicas, como las Canarias. Durante el último millón de años, las islas más occidentales de este archipiélago han registrado hasta 14 grandes deslizamientos. El más reciente se produjo hace unos 15.000 años en la isla de El Hierro. La zona noroeste se desprendió dando lugar a un gran valle que pervive en la actualidad.

Entender este tipo de fenómenos resulta fundamental para comprender la formación y evolución de este tipo de islas. Los investigadores insisten en que es vital estudiarlos, debido a que sus efectos se pueden notar a mucha distancia, pues estos desprendimientos pueden generar tsunamis que viajen varios miles de kilómetros a través del océano. 'Entender los fenómenos más violentos del planeta nos ayudará a estar preparados', afirma Branney.

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