Tenía la pole en la cabeza, y saldrá noveno. La mala suerte y el exceso de confianza de McLaren se juntaron para hurtar a Hamilton la posibilidad real de pelear a Vettel el primer puesto de la parrilla, fundamental en Mónaco. Incluso Alonso reconoció que 'el más perjudicado por el accidente de Pérez fue Lewis'.

El inglés arranca noveno en un circuito donde cada adelantamiento es una proeza. No le sentó nada bien y criticó al equipo: 'En Mónaco no puedes correr riesgos y dejarlo todo para el final. Tienes que tener algo seguro, como ha hecho todo el mundo'.

Hamilton no entiende por qué, cuando apenas faltaban tres minutos para el final de la Q3, su McLaren apenas había salido a pista por vez primera. Sobrevino entonces el brutal accidente de Pérez y apareció la bandera roja. En la reanudación, intentó una vuelta mágica a la desesperada, se saltó una chicane y su único crono el séptimo mejor fue penalizado horas después por los comisarios. Sale desde la novena plaza.

Por lo demás, nadie sabe qué pieza o artilugio guarda celosamente Red Bull en el baúl, pero el caso es que, carrera tras carrera, la escudería austríaca se esconde durante las sesiones de entrenamientos libres para emerger el sábado y firmar la pole. Así ocurrió ayer. Vettel logró la quinta de seis en lo que va de año y Webber, hace una semana, completó el pleno del equipo energético. El australiano sale hoy tercero, acompañado en la segunda línea por Alonso, cuarto en la parrilla. Tras la colisión de Pérez, el español salió para hacer un último intento, pero, como la mayoría de los pilotos, renunció a ella porque ya el primer parcial indicaba que no podía mejorar.

Alguersuari (Toro Rosso) había sido octavo en los entrenamientos matinales, pero en la sesión de clasificación fue molestado por Kobayashi, que estaba prácticamente parado. El barcelonés lo embistió por detrás y tendrá que partir desde la vigésima posición.