Si un atleta detiene sus entrenamientos, pierde la forma de golpe. Es algo que los atletas del grupo de Manuel Pascua comprendieron desde el mismo día en que estalló la operación Galgo. Ante la incertidumbre generada, el grupo ha decidido abandonar las pistas del INEF y desplazarse a Pozuelo de Alarcón para seguir adelante con sus entrenamientos.

Ayer ya se preparaban en las pistas del complejo deportivo del Valle de las Cañas, una instalación pública que incluye un moderno polideportivo inaugurado el pasado 12 de mayo y que gestiona el ex tenista José López Maeso. Las instalaciones, con pistas de atletismo, gimnasio, pabellón cubierto, campos de fútbol y de rugby, se encuentran en las proximidades de la urbanización de lujo La Finca, donde residen, entre otros, Cristiano Ronaldo y Mourinho.

Mientras, la Federación Española continúa con su trabajo de reasignar entrenador a los atletas. Las normas establecen que los becados deben consensuar su entrenador con la federación. La primera en ser reubicada ha sido la velocista Digna Luz Murillo, campeona de España de 100 metros lisos y esposa de Perea, defensa del Atlético. Murillo se entrenaba ya ayer a las órdenes del técnico José Luis Martínez, un prestigioso entrenador de pruebas combinadas recientemente designado director de la Escuela Nacional de Entrenadores.

En un principio, el plan de Pascua suspendido por la federación al ser sorprendido por la Guardia Civil cuando se dirigía a dopar al fondista Bezabeh era seguir entrenando desde la sombra con el ex atleta Antonio Páez como brazo ejecutor en las pistas. Sin embargo, el presidente Odriozola actuó con rapidez para frenar la anomalía.

Nuria Fernández y Reyes Estévez son los atletas de más calidad en el grupo de Pascua. La campeona europea de 1.500 metros se encuentra en plena temporada de cross y el catalán prepara su salto a los 3.000 obstáculos.