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El Banco de Francia confía en que los tipos de interés disminuirán en 2024  

Se espera una bajada progresiva de la inflación que permita minimizar los tipos después de un período de "meseta". 

Francois Villeroy de Galhau, gobernador del Banco Central de Francia, en una reunión mundial sobre economía en Suiza, a 24 de mayo de 2022.
Francois Villeroy de Galhau, gobernador del Banco Central de Francia, en una reunión mundial sobre economía en Suiza, a 24 de mayo de 2022. Mattias Nutt / EP

El jefe del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), Francois Villeroy de Galhau, ha expresado su confianza por que la evolución de la inflación permitirá rebajar los tipos de interés en 2024, después de un periodo de "meseta" tras la gran subida acometida entre julio de 2022 y octubre de 2023.

"Entre el aumento de los tipos, que salvo sorpresas ya ha finalizado, y el recorte, que debería producirse en algún momento de 2024, hay una meseta", ha indicado este martes Villeroy en una entrevista con la emisora France Inter.

El banquero ha insistido, sin embargo, en la necesidad de ser pacientes con el giro de la política monetaria del BCE, ya que, en su opinión, si la bajada de los tipos de interés llega demasiado pronto se correrá el riesgo de volver a caer "en la enfermedad de la inflación".

Análisis del futuro económico

"No deberíamos cantar victoria", ha subrayado justo después de recordar que, a principios de 2023, la tasa de inflación en Francia era del 7%, mientras que ahora es del 3,5% y, además, se espera que baje a un promedio del 2,5% el próximo año y al 2% como máximo en 2025. Esto podría suponer un motor bastante sólido para la economía francesa y algo positivo para el poder adquisitivo y el consumo en Europa.

"Lo voy a decir muy claro: esto no es sólo una previsión, es un compromiso. Haremos que la inflación vuelva al 2% para 2025", ha afirmado Villeroy. Sus palabras refuerzan el mensaje lanzado el pasado jueves por la presidenta del BCE, Christine Lagarde, quien defendió en rueda de prensa que "no hay que bajar la guardia", ya que las nuevas previsiones del BCE apuntan a que la inflación aún será del 2,1% en 2025.

"No discutimos ningún recorte de tipos. No hay debate sobre este tema", resumía el jueves Lagarde, quien apuntó que "no se llega de sólido a gas sin pasar por la fase líquida", para referirse a la necesidad actual de un período de observación económica.

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