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La huelga de Aerolíneas Argentinas deja en tierra a cientos de pasajeros

La compañía ofrece una mejora en los sueldos del 27%, que rechazan los sindicatos por partir de salarios base muy bajos

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Los vuelos de Aerolíneas Argentinas y su subsidiaria Austral, controladas por el grupo español Marsans, quedaron paralizados durante toda la jornada de ayer por una huelga del personal de cabinas, lo que dejó a cientos de pasajeros abandonados a su suerte en los dos principales aeropuertos de Buenos Aires.
   
La empresa 'empujó al paro a los trabajadores' al no conceder un aumento de salarios, según ha afirmado el líder de la Asociación Argentina de Aeronavegantes, Ricardo Frecia, al ratificar la huelga, de 24 horas de duración. El portavoz de Aerolíneas Argentinas, Jorge Molina, sostuvo que el paro responde a la negativa sindical a un aumento salarial del 27%, 'lo máximo' que pueden ofrecer las compañías para superar este conflicto.

Como ha ocurrido en los últimos meses por huelgas y problemas técnicos en los radares en el aeropuerto internacional de Ezeiza, a las afueras de la capital argentina, se sucedieron las protestas de los pasajeros que no podían volar. Aerolíneas Argentinas dijo en un comunicado que los seis vuelos internacionales que debieron realizarse hoy fueron reprogramados para las primeras horas de este martes.

La compañía ha asegurado que los vuelos nacionales dentro de Argentina no registrarán ningún tipo de problema y cumplirán sus horarios habituales. Los trabajadores, en tanto, convocaron a una asamblea general para la tarde de este martes en la que decidirán si realizan una nueva huelga.

Mejora salarial inalcanzable, según Aerolíneas 

'Si hacemos los números de lo que están reclamando llegamos a un aumento del 43%, imposible de otorgar', dijo Molina a la radio Continental tras indicar que las mejoras pactadas con otros sindicatos del sector 'rondan entre el 21 y el 23%'.
   
Sin embargo, Frecia negó que se haya rechazado la oferta de las empresas, a las que acusó de provocar la huelga 'para tapar en los medios de comunicación la ineficacia de las operaciones, ya demostrada en la constante reprogramación de vuelos'. 'Los tripulantes de cabina, que cumplen un trabajo esforzado y de riesgo, ganan un sueldo base de 966 pesos (unos 300 dólares)', puntualizó el sindicalista. 'Se mantuvo la intransigencia evidenciada durante los últimos cuatro meses de negociación, razón por la cual no pudo llegarse a un acuerdo', aseguró a los periodistas.

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