Coín (Málaga), municipio gobernado en coalición por PSOE y Partido Andalucista (PA), se convertirá previsiblemente en el primer ayuntamiento andaluz en prohibir el burka y el niqab en los edificios públicos. De sus 22.000 habitantes, unos 1.500 son musulmanes la mayoría, marroquíes, y 600 de ellos son mujeres, según la edil de Igualdad, Inmaculada Agüera (PSOE). 'Hemos detectado tres casos de mujeres que llevan burka', señala Agüera.

Esta edil afirma que vecinos del municipio le han trasladado su 'inquietud' ante esta situación, sobre todo por temas de seguridad. 'No se puede saber lo que se esconde tras un burka, ni tampoco de un pasamontañas', añade Agüera.

El pleno debatirá el 28 de junio una moción, impulsada por el Gobierno local, que manifiesta 'rechazo' al burka y al niqab por ser prendas 'transmisoras de valores contrarios a los que deben sustentar la convivencia'. También señala que 'su uso no garantiza la seguridad jurídica' al 'impedir la identificación'.

Aunque los diez ediles del PSOE y los tres andalucistas serían suficientes, Agüera asegura que su intención es que también apoyen la moción PP, IU y los dos independientes que integran la oposición. Antonio Sanz, número 2 del PP-A, afirmó ayer que su partido no está de acuerdo en que los ayuntamientos regulen el uso de estas prendas, informa Efe.

El burka y el niqab se podrán usar en la calle. 'No tenemos competencias para prohibirlo', dice Agüera. La intención de la alcaldía de Gabriel Clavijo es vetarlo en todos los edificios públicos, como dependencias del ayuntamiento y centros educativos, de salud y deportivos. Los servicios jurídicos municipales estudian ahora el encaje legal de la prohibición, según Agüera.