José Luis Rodriguez Zapatero recibirá a las 17:30 en el Palacio de la Moncloa a los miembros del Grupo de Impulsores de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), a excepción del presidente ruandés, Paul Kagame , copresidente de la reunión junto a Zapatero.

El primer encuentro de este grupo, que se celebra en Madrid, se ha visto envuelto en la polémica que generó la presidencia del Kagame, acusado de genocidio, y con quien el presidente del Ejecutivo español tenía previsto reunirse este viernes a mediodía. Sin embargo, y debido a la presión de varias ONG, partidos políticos y diputados, Zapatero decidió a última hora de anoche no participar personalmente en las reuniones , trasladando el encuentro al hotel Ritz de Madrid, y con el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Migel Ángel Moratino, como su sustituto.

En esta nueva reunión, que en un principio no estaba prevista, el jefe del Ejecutivo finalmente sí se encontrará con los miembros del grupo de la ONU, pero manteniendo su decisión de anoche, Paul Kagame no asistirá a Moncloa. 

La molestia por la presencia del presidente de Ruanda, acusado de delitos de genocidio, terrorismo y crímenes contra la humanidad, como uno de los principales impulsores del cumplimiento de los Objetivos del Milenio, se ha hecho patente entre los miembros de la política española. El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, reconocía esta mañana en declaraciones a RNE que le 'incomodaba' su presencia en nuestro país. 

La vicepresidenta primera del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, explicó en una entrevista en TVE que Zapatero había sido 'sensible' al atender la petición de algunos grupos políticos y añadió que el Gobierno se reuniría con las formaciones políticas para explicarles los motivos de su decisión. 

El secretario general de la ONU, que asiste también a las reuniones en Madrid, ha señalado que a pesar de ser un 'fuerte creyente' en los principios de los Derechos Humanos, no puede hacer 'ningún comentario' sobre las acusaciones de genocidio que pesan sobre el presidente ruandés.

Fue él mismo quien propuso a Kagame para encabezar el grupo que impulsará el cumplimiento de los Objetivos del Milenio, según ha declarado en la Cadena Ser, y lo hizo por el 'compromiso político' mostrado por el Gobierno de Kigali, que ha permitido que Ruanda sea 'uno de los pocos países en África que han hecho progresos importantes en la reducción de la mortalidad materna e infantil'. 'Espero que muchos países, especialmente en África, sigan el ejemplo de Ruanda', manifestó.

Medio centenar de personas se han manifestado ante la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores para denunciar el nombramiento de Kagame como copresidente del grupo internacional y para reclamar al Gobierno español que asuma el 'liderazgo' contra el mandatario ruandés, el 'mayor criminal en activo del mundo'.

Las organizaciones convocantes, los Comités de Solidaridad con Africa Negra (Umoya) y la Red de Entidades de Desarrollo Solicario (REDES), aseguraron que esta decisión supone 'una gravísima falta de respecto al pueblo ruandés, al pueblo congoleño, a los españoles asesinados allí, a la Justicia española, a la paz y estabilidad mundial' y a la propia ONU, añadieron. 'El Gobierno de España, apoyado en la amplia respuesta social obtenida, debe asumir el liderazgo', prosiguió la declaración.