Público
Público

Gómez Besteiro: "Es una campaña nacional, gran parte de los intereses de los gallegos están centrados en Madrid"

José Ramón Gómez Besteiro, candidato del PSdG a la presidencia de la Xunta
José Ramón Gómez Besteiro, candidato del PSdG a la presidencia de la Xunta, tras la entrevista con 'Público' en Santiago. Jaime García-Morato

Al candidato socialista a presidir la Xunta, José Ramón Gómez Besteiro (Lugo, 1977), se le nota su veteranía y su pasión política, tiene ganas de campaña electoral; asegura que ser el candidato socialista en estas elecciones gallegas "es un orgullo" y está agradecido a Pedro Sánchez por la oportunidad. De amplia trayectoria política (ha sido concejal del Ayuntamiento de Lugo, presidente de esta Diputación provincial, secretario general del PSdG, delegado del Gobierno en Galicia y diputado en el Congreso), tuvo que echar el freno a su carrera política en 2016, víctima de lo que hoy se llamaría lawfare. En 2022, todas las acusaciones desarrolladas contra él por la jueza Pilar de Lara habían sido archivadas sin, ni siquiera, haber abierto juicio. Besteiro, que atiende a Público en Santiago antes de salir pitando a un acto en Lugo, quiere resarcirse este 18F.

Estamos en Santiago...

En Santiago, y no llueve.

Se nos caen los mitos.

Se caen los mitos, y más mitos que van a caer.

¿Qué ministerio le ofreció Pedro Sánchez?

Eso tendría que decirlo el presidente del Gobierno. A mí me basta con el reconocimiento de ese ofrecimiento y que él lo explicitara públicamente. Era un ministerio de gestión. Tan apetecible... Pero yo tenía otras prioridades y el presidente del Gobierno me entendió. Eso se queda para mí, y para mi madre, que decía: "¿No te estarás equivocando?". Pues no, cuando uno toma una decisión, debe asumirla. Como decía el otro, errare humanum est. Pero creo que no me equivoqué.

¿Cuál fue el motivo para decir que no?

"No tenía sentido que me incorporara al Gobierno para presentarme a la Xunta"

Que mi compromiso era por Galicia. Que no tenía sentido que me incorporara al Gobierno para presentarme en unos meses como candidato del Partido Socialista a la presidencia de la Xunta. No me parecía coherente. Creí que no era bueno ni para el Gobierno de España ni para la proyección que yo quería hacer en Galicia.

En Madrid sigue usted como presidente de la Comisión de Transportes del Congreso. Pase lo que pase, ¿dejará el acta de diputado?

"Hay que tener capacidad de influir y decidir en Madrid"

Sí. Mi compromiso es con Galicia. A partir del 18 de febrero estaré en Galicia permanentemente. Pero hasta ese día quiero seguir atando cosas para mi país. Hoy mismo [por el pasado jueves], por ejemplo, estábamos hablando de cosas relacionadas con el transporte, pero fundamentalmente de la energía. De aprobar ese nodo de transición energética para As Pontes y Cerceda, que supone un cambio radical para recuperar a Galicia como un territorio protagonista en el campo de la energía. ¿Y eso cómo se hace? Pues trabajando en Madrid.

Hay quien dice que no se puede nacionalizar la campaña, pero es evidente que es una campaña nacional, porque gran parte de los intereses que tenemos los gallegos y las gallegas están centrados en Madrid. Hay que tener capacidad de influir y para decidir en Madrid. Galicia tiene que tener un lugar importante, sobre todo en esta España que se ha abierto a partir del 23 de julio, una España plural, abierta, diversa, diferente, como la quieren los ciudadanos y las ciudadanas de España. Galicia tiene que tener un protagonismo en ella y no sólo mirar hacia adentro de Pedrafita y O Padornelo.

¿Cómo va hacer usted para movilizar a ese electorado socialista que se queda en casa en las autonómicas pero que vota masivamente en las generales, como sucedió el 23J?

"Que no se conformen y que den un paso adelante para una Galicia mejor"

Generando confianza y pidiendo compromiso. Diciéndoles que lo que se decide en la Xunta afecta a sus vidas. Que esta no es una elección menor. Que cuando hablamos de sanidad pública, de servicios públicos, de dependencia, de proteger el litoral, hablamos de la Xunta y no del Estado.

De estas elecciones depende que la Xunta pueda cambiar sus vidas o que sigamos en la situación de los últimos 15 años: resignación, apatía, inacción, no moverse, apelando siempre a esa Galicia dormida, a que no haya lío... Pero también que no haya vida, movimiento, capacidad de prosperar, de enriquecernos y de enriquecer a los demás con nuestro trabajo y nuestro esfuerzo. Les pido que no se conformen y que den un paso adelante para una Galicia mejor.

¿Qué importancia tiene el voto socialista en esa posibilidad de cambio?

Ese voto socialista es el que cambia la vida de las personas. El que coge una bandera y la lleva hasta el final. Como pasó el pasado 23 de julio, cuando las encuestas decían que la derecha y la ultraderecha estaban disparadas en mayorías absolutas, y al final se vio que muchos hombres y mujeres querían una España diferente y se comprometieron con la causa. Eso sucedió en la última semana de campaña. Tenemos que apelar a ese voto para que la Galicia dormida no siga vinculada a nuestro futuro, para romper con esa apatía.

"Perdemos población mientras España gana población"

Las elecciones significan decidir tras analizar si nos va bien o si nos va mal, si queremos cambiar o no queremos cambiar. Estos 15 años han supuesto un lento declive en todos los campos. Perdemos población mientras España gana población, perdemos fuerza de trabajo mientras España gana fuerza de trabajo... Y, aún así, hemos aumentado la deuda pública. ¿Para qué? Porque no estamos mejor. Ese escenario se puede cambiar.

José Ramón Gómez Besteiro, candidato del PSdG a la presidencia de la Xunta
Gómez Besteiro (PSdG) posa para 'Público' en Santiago de Compostela. Jaime García-Morato

Las encuestas dicen que para que ese cambio se produzca hace falta la cooperación del Bloque Nacionalista Galego. ¿Están ustedes en disposición de decir que ese Gobierno de coalición va a existir?

Tengo la convicción de que se va a producir. Cuando en un ciudadano salta ese chip que le hace pensar que es necesario un cambio y que ese cambio es posible, la siguiente pregunta es: ¿Quién quiero que lo protagonice? ¿Quién debe liderarlo? ¿Quién tiene proyecto, quién tiene experiencia? ¿A quién quiero para gobernar? El ciudadano va a buscar experiencia, equipo, ambición, buenas conexiones en Madrid... ¿Y en quién confluye eso? En el Partido Socialista, el guardián férreo de las esencias de los servicios públicos. El ciudadano tiene grabada esa imagen. Puede que en el fondo de su inconsciente, pero la tiene. En esta campaña vamos a ser capaces de que eso aflore.

Si el ciudadano decide que ese cambio lo tiene que liderar el BNG, ¿usted participaría igual? ¿Está garantizado el Gobierno de coalición?

Los ciudadanos mandan. Y deciden qué va a pasar. Yo creo que van a apostar por el Partido Socialista más que por el BNG. Pero, en todo caso, ellos deciden.

El lunes es el debate electoral en la tele pública gallega. ¿Escenificará usted una entente con Ana Pontón frente a Rueda, que quiere aparecer en un 'todos contra Rueda'?

"Va a aparecer un presidente huidizo que sólo quiere ir a un debate"

Eso es lo que busca un Rueda huidizo. ¿Qué significa que no quiera dar la cara en los debates? Que no quiere presentar su hoja de servicios ante los ciudadanos. Busca escenificar en el debate ese yo o el desastre. Y no lo va a encontrar. Al menos en el Partido Socialista, porque nos vamos a dirigir al ciudadano para hacerle las propuestas que queremos, diciéndole que es él quien decide si quiere cambiar o no. La papeleta la tiene el ciudadano. Si el PP pretende otra cosa, se equivocará. El Partido Socialista va a ser positivo y propositivo, no nos va a encontrar en la negatividad ni en el desastre. No, nosotros creemos que se puede cambiar a Galicia para mejor, y que tenemos los recursos y la capacidad necesarios para sacarla de esta situación.

El PP elegirá su escenario, pero si quien va a aparecer es un presidente huidizo que sólo quiere ir a un debate... Eso es que se siente débil. Yo me apuntaría a cualquier debate si quisiera presentar una hoja de servicios positiva y plena. Rueda representa a un Gobierno ausente.

¿Hablará con Ana Pontón antes del debate?

"Cada uno tiene que presentar su oferta política"

No, en absoluto. Cada uno tiene que presentar su oferta política. Coincidimos en muchas cosas, pero en otras también diferimos. En esta campaña tenemos que ser absolutamente francos frente a la ciudadanía, sin dobles caras. Tenemos que ofrecer nuestro producto, un producto fresco y natural.

Ana Pontón y usted son lucenses militantes.

"No llevo 20 años en el Parlamento autonómico como Rueda y Ana Pontón"

Yo soy lucense y me presento por Lugo. Otros son lucenses y se presentan por otra circunscripción. Me parece bien, no tengo nada que decir. Pero yo no llevo 20 años en el Parlamento autonómico, como Rueda y Ana Pontón. No soy lo mismo. Puedo coincidir en algunas cosas más que evidentes, pero en otras nosotros representamos algo diferente, y creo que más enriquecedor para Galicia.

Está previsto que Sánchez venga mucho a Galicia. ¿Teme que traiga el debate sobre la ley de amnistía como un mal pan bajo el brazo?

"Voté a favor de la ley de amnistía y no tengo ningún complejo"

No. Yo voté a favor de la ley de amnistía y no tengo ningún complejo. ¿Cómo no a venir el presidente de un Gobierno socialista a ayudar en campaña a otro socialista, con el que además comparte ideas y proyectos comunes? Lo que me sorprende es que vengan Mariano Rajoy o Feijóo. ¿Qué puede ofrecerles Feijóo a los gallegos y a las gallegas? Absolutamente nada más que eso de que pudo ser presidente pero no quiso. Yo estoy orgulloso de que venga Pedro Sánchez y de la ley de amnistía, por lo que representa. La semana pasada el presidente mandó un mensaje de templanza a toda España, y esta semana, de firmeza.

¿Y qué nos encontramos la semana anterior? A un Partido Popular votando contra los pensionistas de Galicia: en contra de la subida de las pensiones, de las ayudas al transporte, de 10.000 millones de los fondos europeos... Ese es el problema del PP. Yo estoy orgulloso de haber votado a favor. Por eso quiero que venga Pedro Sánchez. Y Zapatero. Estoy orgulloso de todo ese caudal político. Y además creo que buena parte de los problemas de Galicia se pueden resolver con una buena conexión y una buena influencia con el Gobierno de España. ¿Por qué desaprovecharlo?

Cuando el debate de las elecciones gallegas se estataliza, suele beneficiar al Partido Socialista. ¿Por qué cree que Rueda está apostando por esa estalización de las autonómicas?

"Nadie en Galicia va a decidir en función de la amnistía porque no le afecta en su día a día"

Porque confía en el viejo relato del sentidiño, de la tranquilidad, del no moverse... Puedo entender que en asuntos como el de la amnistía haya gente que no comparte nuestra opinión. Y me parece bien que existan opiniones distintas en este tema. Pero no he encontrado a nadie a favor de negarles la revalorización a 800.000 [pensionistas] gallegos y gallegas. ¿La amnistía va a ser importante? Cada uno puede tener su opinión, pero nadie en Galicia va a decidir en función de la amnistía porque no le afecta en su día a día.

Cuando hablo de nacionalización de la campaña, hablo de nacionalizar los temas que realmente preocupan a los gallegos y a las gallegas, no de esas invenciones del PP para mantener firme y prieto a su electorado. El PP está cayendo en apoyos con esa estrategia de la tranquilidad, del aquí no pasa nada, de la Galicia dormida... Y al final se les van cayendo efectivos.

Usted pasó una travesía del desierto durante la que pareció que su carrera política había llegado a su fin. ¿Cómo lo llevó?

Con la resignación de quien se sabe inocente. Ser inocente da una tranquilidad tremenda. Tenía la conciencia tranquila por haberme comportado como creía que debía comportarme. Me refiero a presentar mi dimisión [como secretario xeral del PSOE gallego], porque creía que todo aquello que se especulaba, y que al final se demostró absolutamente falso, podía perjudicar a mi partido. La decisión la tomé yo, no tuvieron que imponérmela. Y durante esos siete años estuve en silencio porque no tenía nada que decir. Sabía que en ese silencio radicaba mi fortaleza y la de mi mensaje para cuando todo terminara.

Cuando todo terminó, volví justamente a donde no querían que regresara todos aquellos enemigos que se confabularon en aquella operación. No querían que volviera limpio y con más ánimos. Pero les salió radicalmente mal. Mirar hacia atrás con la conciencia tranquila te permite dormir sin auxilio médico y poder decir que has estado a la altura de las circunstancias. Eso se queda para mí. Como lo de ser ministro.

Usted es de Lugo y apuesta por la provincia, se presenta por ella. Está previsto que Altri instale una celulosa allí contra la que están movilizándose colectivos sociales y medioambientales. ¿Qué haría usted al respecto si estuviera en el Consello de la Xunta?

Ayer [por el miércoles] el Ministerio de Industria dijo que el primer papel para buscar fondos europeos para ese proyecto había entrado en diciembre. Hace un mes. ¡Mira que no lleva el PP diciendo que el Estado estaba torpedeándolo! No, no. El Estado lo ha aceptado y lo va a reenviar a la Unión Europea para su evaluación, que será un chequeo importante. No son medidas caprichosas que vaya a decidir el Gobierno de España, sino compromisos medioambientales, sobre consumo de agua, implantación en el territorio...

Ahora es el momento de la inspección y de tomar en cuenta las alegaciones de todos esos colectivos, que pueden tener razón o no, pero es Europa la que tendrá que validarlo teniendo en cuenta las cuestiones que apuntan. Claro que sí.

José Ramón Gómez Besteiro, candidato del PSdG a la presidencia de la Xunta
Gómez Besteiro atiende a 'Público'. Jaime García-Morato

En Lugo hay en juego un escaño decisivo para la próxima Xunta. ¿Le pide un perfil bajo a Sumar en la provincia para aglutinar el voto progresista?

"Le pido a la gente que sea responsable para que el cambio en Galicia sea posible"

En las últimas elecciones generales, las fuerzas de derecha e izquierda estaban muy equilibradas en Lugo. Sin embargo, el reparto final fue tres diputados para la derecha y uno para el Partido Socialista, el que yo represento. Si todos hubiéramos trabajado en la misma dirección, hoy estaríamos hablando de un empate. La gente tiene que reflexionar sobre eso cuando vaya a emitir su voto. Ese voto útil, que no se desperdicia, que no sólo no favorece que se pierda sino que no favorece la implantación de la derecha. Le pido a la gente que sea responsable para que el cambio en Galicia sea posible.

Usted ha propuesto elevar el peso del sector industrial al 20% del PIB gallego, una cifra considerable.

Sí, son cinco puntos más.

¿Cómo se puede conseguir esa reindustrialización acelerada de Galicia?

"Muchos jóvenes huyen de Galicia buscando su futuro en otra comunidad, o en otro país"

Trabajando todos en la misma dirección. Le trasladé al presidente de los empresarios de Galicia un mensaje que no sólo es de los socialistas gallegos, sino de España: somos capaces de hacer crecer la economía, de que haya 21 millones de personas con empleo, una cifra histórica, y de hacer a la vez políticas de distribución de la riqueza. Podemos crecer más, pero podemos crecer todos. Y en eso se tienen que ver implicadas las empresas, que en Galicia no tienen mano de obra porque muchos jóvenes huyen de Galicia buscando su futuro en otra comunidad, o en otro país. La formación profesional no emite trabajadores y trabajadoras que puedan servir para nuestras industrias.

Tenemos que retener y atraer talento, y esa labor conjunta la tenemos que hacer entre todos, no sólo los empresarios. La reindustrialización tiene que venir de la mano de las empresas y los empresarios, asumiendo que cuando hay más beneficios, hay más a repartir. Eso es lo que van a encontrar los empresarios en mi Gobierno en la Xunta: todas las facilidades, pero también todas las capacidades para devolver y redistribuir ese beneficio.

Otro de los ejes de su política social son los servicios públicos. Este domingo está convocada una manifestación en defensa de la sanidad pública. ¿Estará allí? ¿Cuáles son sus propuestas para los problemas de la sanidad gallega?

Apostamos por rescatar la sanidad pública, sobre todo la atención primaria. Aún podemos recordar cuando llamábamos por teléfono a la atención primaria y nos atendían el mismo día o como mucho al día siguiente. Ahora es una epopeya. Tener que esperar 15 días para que te atiendan en la atención primaria... Es impensable cuando hablamos de sanidad pública.

Durante los últimos 15 años, ¿hubo política sanitaria? ¿hubo planificación? No. Y los fallos del sistema son únicamente imputables al Partido Popular. Vamos a cambiar esa línea.

¿Cómo lo harán?

"Nos vamos a implicar en la sanidad pública porque da cobertura al 95% de la población"

En el año 2024 los presupuestos de la Xunta crecen menos que el IPC. Por lo tanto, la inversión en sanidad pública no va a crecer. Va a decrecer. Nosotros vamos a garantizar que se atienda a la gente en atención primaria en menos de 48 horas; vamos a renovar y construir nuevos centros de salud; vamos a renovar la plantilla... No es sólo una cuestión de dinero, sino de redistribuir bien los efectivos.

Y vamos a hacer ofertas ventajosas a nuestros profesionales sanitarios para que no se marchen. Nos vamos a implicar en la sanidad pública porque da cobertura al 95% de la población de Galicia. Hay otro 5%, que es para el que trabaja el PP, que no tiene esos problemas porque los tiene cubiertos por otra vía. Nosotros trabajamos para ese 95%.

Resuma su programa.

"Gobernar es asumir responsabilidades"

Se resume en tres patas: la mejora económica y el empleo; más derechos en los servicios públicos, no sólo en la sanidad sino también en la educación y en los servicios sociales y de dependencia; y más ambición de país. Me resisto a creer que los problemas de Galicia están fuera.

Galicia tiene que salir de esa mirada miope, pero también debe luchar contra quienes eluden su responsabilidad dentro achacándoselos al Estado. O a los ayuntamientos. Lo vimos en la gestión de los pellets. El Gobierno que presumía de una ley de litoral que asumía competencias, cuando tuvo que asumirlas resulta que no lo hizo: las playas dependían de los ayuntamientos, el mar del Estado, y el aire... Pues no sé, de la OTAN, o de la ONU... Todo menos asumir responsabilidades. Y gobernar es asumir responsabilidades.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias